MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Nacional celebra hoy la decimoctava sesión del juicio oral por el escándalo financiero de Gescartera, en la que declarará como testigo el antiguo director de Supervisión de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) David Vives. El testigo elaboró en abril de 1999 un informe en el que detalló la existencia de irregularidades en la agencia de valores y un posible desfase patrimonial de 27 millones de euros.
Las conclusiones de la investigación llevaron al Consejo de la CNMV a convocar una reunión extraordinaria el 16 de abril de 1999 en la que supuestamente se habló por primera vez de intervenir Gescartera.
Según declaró el propio Vives ante el Juzgado de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, durante dicha reunión él mismo propuso intervenir Gescartera, decisión que no llegó a tomarse debido a la división de opiniones entre los consejeros. En el acta de la reunión no consta que se discutiera sobre la intervención.
Vives siempre ha mantenido que tuvo el apoyo del entonces presidente Juan Fernández Armesto y del ex consejero José Manuel Barberán, mientras que el vicepresidente Luis Ramallo y los entonces consejeros Pilar Valiente y José María Roldán se opusieron a la intervención.
Durante la reunión extraordinaria también se decidió cambiar a Vives y dejar la inspección de Gescartera en manos del entonces director de la Unidad de Vigilancia de Mercados, Antonio Botella. Botella declaró el pasado 16 de noviembre en el juicio y afirmó que una de las mayores dificultades para detectar el agujero patrimonial era que "los clientes no se quejaban y daban su conformidad" con los datos que aportaban los responsables de la agencia de valores.
La inspección dirigida por Vives encontró un posible desfase de alrededor de 27 millones de euros después de cotejar el saldo de diez clientes a los que Gescartera asignó beneficios por 33,5 millones de euros y en cuyas cuentas bancarias sólo se encontraron 6 millones de euros.
ENTIDADES QUE OPERARON CON GESCARTERA.
Hoy también declararán como testigos la directora e interventor de la sucursal nº 32 de Bankinter en Madrid María Esther Cubillas Rodríguez e Ignacio Núñez Núñez, respectivamente. Gescartera operó a través de esta sucursal entre mayo de 1996 y mayo de 1999, donde llegó a abrir 699 cuentas a nombre de los clientes, cuyos fondos se gestionaban a través de una cuenta global que utilizaban los directivos de la agencia de valores.
Por otra parte, comparecerán los empleados de Deutsche Bank José Ramón Díez Álvarez y Pablo de la Mata. En 1999, Bankinter exigió la autorización de los clientes para abrir sus cuentas, con lo que Gescartera trasladó la operatividad a Deutsche Bank ordenando la apertura de 1.050 cuentas. La entidad remitía la información bancaria directamente a Gescartera y no a quienes figuraban como titulares de las cuentas individualizadas. Bankinter también traspasó la gestión de los valores.
Por último, testificará el representante de Caja Madrid Bolsa Antonio Pérez Hernández, que en octubre de 1999 suscribió el contrato con Gescartera por el que Caja Madrid Bolsa prestó los servicios de liquidación, depósito y administración de valores en régimen de subcontratación que la agencia de valores debía a sus clientes a cambio de la remuneración pactada. Caja Madrid Bolsa está acusada como responsable civil subsidiaria.
