Millar y medio de trabajadores se quedan en la calle tras el cierre de la fábrica de Delphi en Cádiz

Actualizado: viernes, 23 febrero 2007 1:01


PUERTO REAL, 23 Feb. (OTR/PRESS) -

Los problemas del sector industrial del motor en España se agravan con el cierre de la planta de componentes para la automoción que la multinacional estadounidense Delphi tiene en la localidad gaditana de Puerto Real, que dejará a unos 1.500 trabajadores en la calle. Según anunció ayer la propia empresa, después de un análisis "exhaustivo" de la situación financiera y legal del negocio se ve "obligada" a cerrar la fábrica. Ante esta situación, la Junta de Andalucía aseguró que actuará "en defensa" del empleo ante el "gravísimo" impacto que supondrá para la localidad tantos despidos. Por su parte, el Comité de Empresa ha iniciado un encierro en las instalaciones de la empresa.

'Delphi Automotive Systems España' informó ayer a los representantes laborales de su planta en Puerto Real del cierre de la fábrica. Mediante un comunicado explicaron que la empresa ha incurrido en pérdidas operativas significativas durante los últimos cinco años por un importe total de 150 millones de euros, además de sufrir "altos costes" y ser "incapaz" de atraer nuevos contratos de negocios "de manera competitiva".

Además, los productos fabricados en la planta -direcciones, suspensiones y rodamientos- se identifican como líneas de producto "no esenciales", dentro de la gama de productos de la casa matriz. Así, Delphi "no puede justificar" proveer más apoyo financiero para las líneas de producto "no esenciales" que continúan generando pérdidas.

Pese a todo, la empresa de automoción dice ser "consciente" de las consecuencias que el cierre de la fábrica supondrá entre sus empleados, clientes, proveedores y diferentes agentes implicados por lo que expresó su deseo de empezar "inmediatamente" un diálogo con los representantes de los trabajadores, la Administración y las instituciones públicas correspondientes, para alcanzar un acuerdo "adecuado" y de ese modo, "evitar la reducción de los limitados recursos disponibles".

"GRAVÍSIMO" IMPACTO

Ante esta situación, la Junta de Andalucía aseguró que actuará "en defensa" de los puestos de trabajo desde "el diálogo permanente" con los representantes sindicales de la fábrica, ya que, según el Gobierno autonómico, el cierre supondrá un "gravísimo" impacto tanto por la importante afectación a los puestos de trabajo, directos o indirectos, como en la economía de los municipios de la zona.

Asimismo, la Junta advierte que de acuerdo con la legalidad vigente exigirá a la empresa "un comportamiento ajustado" a la misma, garantizando el respeto a los derechos que la Ley atribuye a los trabajadores, así como el cumplimiento de los compromisos suscritos con los mismos.

En este sentido, el comité de empresa de la planta gaditana ha iniciado un encierro hoy en las instalaciones de la firma para oponerse a la decisión de la dirección. Además, ha convocado una manifestación para el próximo miércoles en Cádiz y ha pedido a los trabajadores que "ocupen" las instalaciones, permanezcan en sus puestos y cumplan sus turnos, incluyendo los fines de semana y los días festivos para que "siempre haya alguien en la fábrica".

"RECHAZO Y DESACUERDO"

Por su parte, el PSOE de Cádiz mostró su "más enérgico rechazo y desacuerdo" a esta situación y aseguró que "velará" porque se cumplan "escrupulosamente" los derechos de los trabajadores. Los socialistas prometieron mover "todos los hilos políticos, de ámbito nacional e internacional, para tratar de aminorar los efectos perniciosos de esta injusta decisión". También el PP calificó de "muy negativo" el cierre de Delphi porque "desertiza a la Bahía de tejido industrial, uno de los mayores generadores de riqueza". Por ello, mostró su "apoyo y disposición a los trabajadores y sindicatos de Delphi para que esto no se lleve a cabo". IU-ICV, pide además, responsabilidades al Gobierno.

Comisiones Obreras anunció que estudiará la respuesta de la central sindical para pedir a la planta americana "que rectifique su actitud" que, a su juicio, es "muy poco responsable" y "que busque la solución al conflicto" que pasa por evitar el cierre de la factoría gaditana.