La bodega ha procedido a acogerse a un ERTE para adecuar el nivel de gastos al fuerte descenso de las ventas
MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
Bodegas Riojanas ganó un 67,2% menos en el primer trimestre de 2020, hasta alcanzar los 57.000 euros, a causa de la crisis sanitaria del coronavirus, respecto a los 175.000 euros registrados en el mismo periodo del ejercicio anterior, según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Entre enero y marzo, la facturación de la bodega se situó en 2,4 millones de euros, lo que supone una caída del 29%. La bodega ha explicado que las ventas en mercados internacionales se desplomaron un 49,5% y las nacionales un 23,7% por el efecto de la pandemia.
Bodegas Riojanas ha subrayado que en esta crisis sanitaria el principal canal de venta afectado es el Horeca y ha advertido de una "cierta ralentización" en algunos mercados exteriores, aunque ha destacado que China, donde empieza a observarse una vuelta a la normalidad.
Respecto al canal de alimentación, la bodega española ha apreciado que tiene un "comportamiento normal" e incluso percibe un incremento de actividad en el canal de venta directa.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) se redujo un 14%, hasta alcanzar los 504.000 euros, lo que supone un 22,9% sobre el importe neto de la cifra de negocios consolidada.
SE ACOGE A UN ERTE POR LA CRISIS
Por otro lado, la bodega española ha procedido a acogerse a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para adecuar el nivel de gastos al fuerte descenso de las ventas.
De esta forma, presentó un primer expediente con fecha de inicio el 30 de marzo para todos los empleados cuya actividad estaba ligada con el enoturismo, mientras que en abril se acogió a otro para los comerciales que están directamente relacionados con la hostelería, ya que como consecuencia del estado de alarma su actividad se ha visto paralizada.
Por otro lado, la bodega también ha presentado un ERTE por "causas productivas" para el resto de personal tanto de Bodegas Riojanas como de Bodegas Viore, en diferentes porcentajes, en función del puesto de trabajo, para adecuarse al descenso de actividad producido.
