El cooperante italiano liberado hace dos días en Filipinas reconoce que tenía pocas esperanzas de ser liberado

MANILA 13 Jul. (Reuters/EP) -

El cooperante italiano de cruz roja liberado ayer por el grupo separatista musulmán Abu Sayyaf tras más de seis meses de cautiverio, Eugenio Vagni, reconoció que tenía pocas esperanzas de recobrar la libertad.

Vagni, de 61 años de edad, fue liberado de forma pacífica en Maimbung, municipio situado en la isla de Jolo desde el que fue escoltado hasta una base militar por miembros del Ejército y por el vicegobernador de la provincia, Nur-Ana Sahidulla, que había actuado como mediador.

En el complejo militar, situado en la ciudad de Zamboanga, en el sur de Jolo, donde se reecontró con algunos de sus compañeros de la organización, se le realizó un examen médico. Horas después de su liberación, con síntomas de debilidad y lágrimas en los ojos, el cooperante italiano agradeció su liberación "a todas las personas que han hecho que ocurra, porque creí que nunca pasaría".

Las autoridades locales desmintieron las informaciones aparecidas en algunos medios digitales en las que se aseguraba que Vagni había sido liberado como consecuencia de un intercambio. Según esas informaciones, el trabajador de Cruz Roja habría sido entregado como respuesta a la liberación de dos de las esposas de uno de los líderes de Abu Sayyaf, que habían sido detenidas en un puesto de control militar el pasado martes.

El Ejército ha negado la existencia de un acuerdo para el intercambio de prisioneros y ha asegurado que la puesta en libertad del cooperante italiano se ha debido a la presión ejercida por las fuerzas de seguridad.

En declaraciones a la cadena filipina ABS-CBN, Sahidulla sí admitió el pago de una pequeña cantidad de dinero a cambio de la liberación de Vagni, unos 742.000 euros. El jefe de la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Filipinas, Jean-Daniel Tauxe, aseguró que el "CICR está aliviado y feliz por el pronto regreso de Vagni con su familia y amigos".