Actualizado 27/09/2011 09:36

Fundación Deporte y Desafío organiza cursos con caballos para fomentar el desarrollo físico de niños con discapacidad

Menor Con Discapacidad En Un Curso De Hipoterapia
FUNDACIÓN DEPORTE Y DESAFÍO


MADRID, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Deporte y Desafío ha organizado dos cursos de hipoterapia --terapia con caballos-- para fomentar el desarrollo físico y psíquico de niños con discapacidad que se celebrarán los días 27 de septiembre y 3 de octubre en la Escuela de Equitación San Jorge, en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes, de 16 a 19 horas.

Según informa la fundación, estos cursos patrocinados por Merril-Lynch tienen el objetivo de que los participantes "tengan la oportunidad de mejorar su condición física y psicológica". Cada uno de los cursos consta de doce sesiones terapéuticas de 45 minutos y se imparten una vez por semana durante tres meses. El número de participantes en esta edición es de diez, según agrega la fundación.

Esta iniciativa también pretende que los menores "disfruten de una jornada de convivencia e integración que contribuya a potenciar sus habilidades sociales y aumente su autonomía personal, utilizando el deporte como herramienta".

Igualmente, indica que los expertos afirman que las terapias ecuestres "son complementarias a otras terapias tradicionales" para el tratamiento de personas con discapacidad física, psíquica y sensorial; personas con alteraciones de comportamiento o trastornos afectivos; enfermedades crónicas degenerativas; con amputaciones de miembros; o con lesiones deportivas.

"El caballo les ayuda a mejorar en todos estos aspectos", afirman los expertos. Además, entre los beneficios que obtienen los participantes en estas actividades, destaca "una mayor coordinación de movimientos y equilibrio, más confianza y seguridad en sí mismo y la mejora de la posición de la columna vertebral".

En relación con los efectos físicos, la fundación subraya "el incremento de la capacidad de percepción del movimiento, los efectos terapéuticos del calor que transmite el caballo al paciente, el aumento de la relajación de la fibra muscular o la disminución de las frecuencias cardiaca y respiratoria".

Finalmente, apunta que en el plano psicológico estas sesiones de hidroterapia "estimulan la atención, la concentración, la comprensión, la memoria y el aprendizaje, y aumenta la autoestima y la seguridad en uno mismo". "En el ámbito social, la simple suma de algunos de estos factores determina una mayor facilidad en los progresos de integración de la persona", concluyen.