Actualizado 02/07/2007 15:52

Hombres jóvenes empiezan a demandar una paternidad responsable con dificultades en su entorno laboral, según un estudio

MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

Los hombres jóvenes empiezan a demandar una paternidad responsable, aunque este deseo se ve dificultado por las reacción adversa que se genera en su entorno laboral, según pone de manifiesto el estudio cualitativo 'Los hombres jóvenes y la paternidad', presentado hoy por la Fundación BBVA.

En todo caso, las autoras de este trabajo, las sociólogas Inés Alberdi y Pilar Escario, advirtieron de que esta actitud la mantiene una minoría de los hombres españoles aunque marca ya una nueva tendencia. Así, aseguran que las nuevas generaciones de padres están poniendo en cuestión el estereotipo de masculinidad asociado tradicionalmente a la fuerza y el poder, para empezar a ejercer una "paternidad sostenible".

En todo caso, advirtieron de que estos deseos y opiniones todavía no se han producido en la realidad porque es necesario un cambio en el comportamiento de los hombres así como en las instituciones económicas (empresa privada) y las administraciones públicas. "Los hombres tienen enormes dificultades en sus ambientes de trabajo --comentó Alberdi--. Se les reprocha mucho que se dediquen al cuidado de los hijos. Mucho más que a las mujeres".

No obstante, precisó que los varones están menos dispuestos a aceptar unas penalizaciones laborales que las mujeres asumen a cambio de su maternidad. "Están menos preparados para que la paternidad frene su carrera profesional", puntualizó. En definitiva, Alberdi aseguró que España está en una fase de transición en lo que se refiere a la estructura familiar y las relaciones internas de esta unidad que para consolidarse, requiere, en primer lugar, un cambio de comportamiento de los hombres.

El estudio está basado en entrevistas personales y 12 grupos de discusión celebrados en Madrid, Barcelona, Sevilla y Bilbao. De las mismas, las autoras concluyen que existen tres variantes de padres "sostenibles": el "intenso", que vive con una "profunda emoción" la relación con el hijo; el "responsable", que quiere vivir equilibradamente con su pareja la relación con el hijo y dedicarle el 50 por ciento de su tiempo; y el "adaptativo", que se responsabiliza del cuidado de los hijos porque entiende que es de justicia y, básicamente, porque se lo pide su pareja.

Estos nuevos modelos de padres empiezan, según Escario, a suavizar "las aristas profundas del machismo" al establecer unos vínculos afectivos con los hijos desde que son bebés. En este sentido, ambas expertas apuntaron que un apoyo a este vínculo es la reciente Ley de Igualdad y el derecho de los padres a disfrutar de un permiso de paternidad de 15 días. Además, los hombres aprenden a cuidar de otro, algo para lo que no nunca antes habían sido educados, y se "deconstruye" la jerarquía familiar patriarcal de orden autoritario.

SOCIEDAD MENOS VIOLENTA.

"El cambio de identidad masculina está ayudando a socializar al hombre en nuevos roles que permiten albergar la esperanza de un escenario en el que la sociedad sea menos violenta", aventuró.

También supondrá un beneficio añadido para los hijos, que verán reforzada la presencia y atención paternal, mermada por la obligación de la madre de compatibilizar el trabajo con las responsabilidades familiares. Estos hijos son, según comentaron, más deseados que en el pasado gracias a la utilización de métodos anticonceptivos, que permiten a las parejas planear su paternidad. "El valor del hijo está en alza en la sociedad aunque se haya reducido drásticamente el número de hijos", explicó Alberdi.

En todo caso, en la sociedad española de todos los modelos mencionados el más numeroso, dentro de esta minoría, sería el "adaptativo" el hombre que colabora en el cuidado de los hijos porque así se lo piden.

Finalmente, para ilustrar el hecho de que la paternidad responsable es todavía una tendencia no traducida a la realidad recordaron algunos estudios cuantitativos. Así, según una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de 2004, dos de cada tres españoles adultos y tres de cada cuatro jóvenes desean vivir en una familia de tipo igualitario, en el que el hombre y la mujer trabajen fuera de casa y se repartan por igual las tareas del hogar pero, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2004, los hombres sólo invierten 157 horas anuales al cuidado de los hijos mientras que las mujeres les dedican 561 horas al año.