Actualizado 22/11/2007 18:07

Juzgan a un hombre en Valencia acusado de pegar a su ex pareja y encerrarla para que no fuera a otro juicio por maltrato

VALENCIA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

La sección tercera de la Audiencia Provincial de Valencia juzgó hoy a un hombre, Luis C.M., acusado de abordar en la calle a su ex pareja, de la que tenía una orden de alejamiento, golpearla y encerrarla en una habitación para impedir que escapara y pudiera testificar al día siguiente en otro juicio por violencia doméstica. El acusado negó hoy los hechos que se le imputan.

El ministerio fiscal pidió hoy un total de 13 años de prisión para este hombre --que se encuentra en la actualidad en prisión provisional-- por los delitos de detención ilegal, quebrantamiento de medida cautelar, obstrucción a la justicia, robo con violencia, lesiones contra la mujer y falta de daños, mientras que la defensa de la víctima solicitó 15 años de cárcel.

En la sala, el acusado negó haber estado con la víctima la noche en la que supuestamente ocurrieron los hechos ya que, según dijo, había estado en Valencia, en la Cremà de las fallas. Explicó que la mujer lo llamó por teléfono para que recogiera una maleta en un bar y que él la vio de lejos pero que optó por no encontrarse con ella. El hombre reconoció que tenía una orden de alejamiento y un juicio por maltrato familiar al día siguiente.

El acusado señaló también que la mujer tenía problemas con el alcohol y la droga y que ha tenido conflictos con todas sus parejas anteriores, y tras negar los hechos que se le imputan, comentó que pudo denunciarlo porque tenía celos de su hijo.

Los hechos ocurrieron a las 00.00 horas del pasado 20 de marzo en la localidad valenciana de Picassent. Según el relato del fiscal, el acusado, sobre el que recaía una prohibición expresa de aproximarse a su ex pareja, Olga C.M, abordó a la mujer a las puertas de su domicilio y le gritó: quítame la denuncia, en referencia a una denuncia por maltrato por la que el acusado tenía un juicio contra ella al día siguiente en Valencia y en cuya virtud regía la orden de alejamiento.

"GOLPEÓ VIOLENTAMENTE".

Tras gritarle, le arrancó el teléfono móvil, "impidiéndole llamar", y le sustrajo 100 euros, las llaves de una moto y las de la casa. A continuación, indica el fiscal, la introdujo a la fuerza en su domicilio y en el interior la golpeó violentamente, causándole contusiones en el hemitórax izquierdo y pierna izquierda, lesiones de las que tardó ocho días en sanar, cuatro de los cuáles fueron impeditivos.

Más tarde, el acusado huyó del domicilio con las llaves y dejó a la mujer encerrada en una habitación. Para impedir que escapara y testificara al día siguiente, relata el fiscal, el acusado había echado un pestillo exterior. Finalmente, la mujer pudo escapar a las 8.00 horas del día siguiente por una pequeña ventana tragaluz, y llegó al juicio para testificar.

Por estos hechos, el fiscal pide 13 años de prisión para el acusado, así como que pague una multa de 200 euros y, en concepto de responsabilidad civil, 500 euros por las lesiones y los objetos dañados y sustraídos.

Tras testificar, la mujer indicó a los periodistas que el acusado --con el que había convivido un par de años-- tenía una orden de alejamiento porque le había pegado "repetidamente". El día de los hechos señaló que acudió a su domicilio y la metió "a la fuerza" en casa, donde empezó a pegarle hasta que perdió el conocimiento, y la encerró en una habitación.

"ME PEGÓ POR TODOS LADOS".

"Me pegó por todos lados, patadas, puñetazos...; a lo bestia, indiscriminadamente", indicó la mujer, quien señaló que ya había denunciado al acusado otras tres veces anteriores por agresión. "Se ponía a beber, zumbado y se le iba la mano", agregó.

La mujer despertó encerrada en la habitación, "en la cama, tumbada y sin camiseta", y esperó a que se fuera su ex pareja para escapar, finalmente, por una ventana. La mujer dijo, asimismo, que el hombre intentó asfixiarla con un almohadón y que iba a matarla. "Venía a matarme, no venía a otra cosa", comentó al respecto.