GINEBRA, 25 Jul. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Turquía ha comunicado al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) que su frontera con Siria estará cerrada al tráfico comercial pero permanecerá abierta para los refugiados sirios que huyen de su país a causa del conflicto, según ha informado este miércoles una portavoz de ACNUR.
"Hemos recibido garantías de que va a continuar abierta. La frontera está cerrada para todo el tráfico comercial en ambas direcciones, eso es lo que nos ha dicho el Gobierno turco", ha explicado la portavoz, Sybella Wilkes.
Wilkes, que ha indicado que unos 300 sirios entraron esta noche a Turquía, algunos a través de pasos fronterizos no oficiales, ha afirmado que "el Gobierno turco sigue recibiendo activamente a los refugiados y ofreciéndoles protección".
Unas horas antes, una fuente del Ministerio de Aduanas y Comercio de Turquía había indicado que a partir de este miércoles iban a quedar cerrados todos los pasos fronterizos con Siria como consecuencia del aumento de la inseguridad.
Cruzar la frontera se ha convertido en una tarea cada vez más peligrosa para los camioneros que transportan mercancías entre ambos países, ya que corren el riesgo de resultar afectados por los enfrentamientos entre los bandos enfrentados en Siria.
Desde que comenzó la revuelta contra el presidente Bashar al Assad, unos 120.000 refugiados sirios se han registrado ante ACNUR en cuatro países vecinos: Irak (7.490), Jordania (36,323), Líbano (31.004) y Turquía (43.387).
En las últimas semanas, se ha duplicado el número de sirios que llegan a Jordania --entre 1.200 y 1.300 cada día--, según Wilkes, que ha señalado que 6.500 personas viven en condiciones de abandono en un centro saturado.
ACNUR está intentando establecer urgentemente un campamento en Zaatri, en la provincia de Mafraq. "Estamos trabajando incluso de noche para tenerlo listo. Es posible que tengamos que trasladar allí a miles de personas", ha dicho.
