Actualizado 18/01/2010 17:03

La defensa del uruguayo que dejó embarazada a su cuñada menor pedirá que ambos vuelvan a declarar


OVIEDO, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

El letrado que ejerce la defensa del ciudadano de nacionalidad uruguaya acusado de abusar sexualmente y dejar embarazada a su cuñada, menor de edad, en diciembre de 2007, solicitará que el imputado y la joven presten nuevamente declaración ante el Juzgado de Instrucción número 4 de Gijón, "para clarificar los resultados del reconocimiento psicosocial" realizado a la joven.

La magistrada Carolina Trabanco reabrió la causa contra el hombre -que había sido archivada por las contradicciones en el testimonio de la menor- y solicitó más pruebas, entre las que se encontraban un informe psicosocial de la víctima elaborado por el forense y otro del centro de menores Padre Larrañaga de Gijón, donde permanece internada, bajo la tutela del Principado.

Según informaron fuentes jurídicas a Europa Press, a la vista de dichos informes, la defensa propondrá que la instrucción incluya una nueva declaración de la chica y del imputado, en libertad y sin antecedentes penales.

La defensa admite que hubo relaciones sexuales entre ambos, pero asegura que fueron siempre "consentidas y sin agresión". Como resultado de los dos encuentros "esporádicos" que ambos mantuvieron en noviembre y diciembre de 2007, la joven se quedó embarazada.

Según el relato policial, la joven les informó de que a primeros de diciembre mediante "engaños y falsas promesas", su cuñado la intentó convencer para mantener relaciones. Ella accedió voluntariamente, realizándolas en el domicilio familiar cuando no se encontraba su hermana.

Según su declaración, a lo largo del mismo mes su cuñado lo volvió a intentar en varias ocasiones, pero ella no accedió a las pretensiones del hombre, si bien admitió que en ocasiones en las que no estaba presente su hermana le había tocado.

Como el detenido no conseguía sus propósitos la amenazó con contar a su hermana que mantenían una relación, lo que provocaría que la mandasen de vuelta a su país de origen, Paraguay. Por ello, ante el temor de que cumpliera sus amenazas y sin el consentimiento de la chica el cuñado la obligó a mantener relaciones sexuales.

El día 13 de enero la joven se encontraba mal y decidió hacer la prueba del embarazo, que resultó positiva. Tras informar de ello al cuñado, él le prometió que le daría dinero para que abortase. En la mañana de su detención la víctima le pidió 400 euros para practicar el aborto. Fue entonces cuando su cuñado le negó el dinero y la echó del domicilio. La joven, de 15 años, pasó a la tutela del Principado y su cuñado quedó en libertad provisional, tras tres días detenido.

En julio, la causa fue archivada y se reabrió en el mes de septiembre a petición de la letrada de la Consejería de Bienestar Social, Irene Arce. Por el momento, continúa la instrucción.