Actualizado 17/02/2009 13:15

La Delegación del Pueblo Saharaui en España descarta intervenir en el caso de la joven supuestamente retenida

MADRID/CÓRDOBA, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Delegación del Pueblo Saharaui en España ha descartado intervenir en el caso de la joven saharaui Mimouna Bachir Mokhtar en el que la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Lucena (Córdoba) ha imputado a su familia por un presunto delito de detención ilegal contra ella para llevarla hasta un campo de refugiados de Tindouf.

Según informó a Europa Press un portavoz de la delegación, tienen conocimiento del caso por "cartas" que le han llegado, entre ellas, del abogado del novio de la chica, pero descarta intervenir al entender que es un problema entre dos familias, "que además, no están en España, y del que ya se encarga la Justicia", pese a que el padre sí continúa viviendo en Lucena.

"La delegación intervendría si se lo reclamase la Justicia pero no por el momento, al considerar que debe resolverse entre las dos familias afectadas", según aseguró este portavoz. Además, dijo que "este asunto se había abordado en la delegación, ante el delegado, Buchraya Beyun, teniendo como resultado, esa decisión de no intervenir".

Por su parte, el letrado del novio de la joven, José Antonio Serrano, en declaraciones a Europa Press acusó hoy al Frente Polisario de "estar dando cobertura" a la familia de la joven, por lo que pidió que actúen y no se "escuden en que es un problema de familia porque ya hay cuatro imputados y ellos lo saben".

Insistió en que "tienen conocimiento oficial de la situación" y consideró que tienen obligación como mínimo de investigar lo que está ocurriendo y "no han hecho nada".

El pasado 11 de agosto, el novio de Mimouna, Pablo Miranda, presentó una denuncia en la Policía Nacional, por la que la jueza inició diligencias y tomó declaración al padre de la hija, quien manifestó entonces que "ella estaba en Argelia, en los campamentos saharauis, a los que se había desplazado por su propia voluntad para visitar a un familiar".

La relación entre estos dos jóvenes comenzó hace más de un año y medio y para poder verse, "ella tenía que engañar a su padre porque no quería que mantuviese relaciones con personas ajenas a su círculo", comentó Pablo.

De hecho, destacó que en una ocasión ella le dijo que tenían que dejar la relación porque no iba a ser aceptado por su familia, procedente de los campamentos saharauis de Tinduf, al tiempo que le dijo a sus amigas que un hombre, también de nacionalidad argelina había estado en su casa y que se trataba "del novio que su padre había elegido para ella".

Además, según explicó Pablo Miranda y su letrado, alrededor del mes de abril de 2007, Mimouna salió un día de casa "tras haber recibido una paliza de su padre", por lo que se alojó en un hotel de Lucena durante tres días. Luego, se trasladó a vivir a Córdoba y los fines de semana los pasaba en la casa de su novio en Encinas Reales (Córdoba).

Afirmaron que en la semana de la desaparición, un día que durmió en la casa de sus padres, "le quitaron el pasaporte" y el 9 de agosto recibió una llamada de su hermano diciéndole que tenía que ir a ver a su madre porque estaba muy enferma. Entonces, se desplazó a Lucena y a partir de ese momento su móvil dejó de estar operativo.

COMISIÓN ROGATORIA

Por su parte, la jueza elaboró el pasado 8 de enero una comisión rogatoria, que tiene como objeto que la autoridad judicial que corresponde a la ciudad de Tindouf, en los campamentos saharauis, facilite a Mimouna Bachir la posibilidad de viajar a España para comparecer como perjudicada. Asimismo, pide a las autoridades argelinas que interroguen a la madre y a los dos hermanos, que también se cree que puedan estar en el campamento de Tinduf.

El motivo de esta solicitud que hace la jueza "tiene como finalidad averiguar las circunstancias que concurren en la desaparición de Mimouna de territorio español, existiendo indicios fundados de que abandonó el país en contra de su voluntad, siendo forzada directamente por sus familiares, su madre y sus hermanos, habiendo utilizado con ella la violencia física. Todo ello previo acuerdo con el padre de Mimouna, que aún se encuentra en España", según detalla el escrito.

En la exposición de los hechos, la jueza señala que "se tiene conocimiento de que Mimouna salió de España en barco desde el puerto de Alicante, en dirección al Sahara obligada por su familia. Allí se encuentra sin posibilidad de salir libremente, habiendo manifestado su voluntad de volver a España".

Según añade, este hecho podría constituir un delito contra la libertad, castigado en el artículo 163 del Código Penal español vigente con pena de prisión de cuatro a seis años, y dado el tiempo transcurrido desde la detención, 10 de agosto de 2008, con pena de prisión de cinco a ocho años.