Actualizado 13/11/2007 16:27

Democracia Nacional niega tener relación con la muerte del menor en Legazpi (Madrid) y lamenta su fallecimiento

Culpan al PSOE y a la Delegación del Gobierno en Madrid de la muerte, ya que "no pusieron los medios efectivos necesarios"


MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Democracia Nacional, Manuel Canduela, negó hoy que su partido estuviese relacionado con los incidentes del pasado domingo en Madrid, donde un menor murió tras ser apuñalado en Legazpi, y lamentó el fallecimiento del joven, un hecho que calificó de "muerte anunciada", debido a los enfrentamientos que habitualmente se producen entre grupos de ideología neonazi y antifascistas.

En declaraciones a los medios durante la celebración de una rueda de prensa, Canduela reiteró que su organización "condena la violencia" y que la manifestación convocada el pasado domingo se desarrolló "de manera pacífica". "Lamentamos todas las muertes, incluso las de nuestros adversarios políticos", añadió.

En esta línea, dijo no sorprenderse por el fallecimiento del joven, que tildó de "desgraciado", pero señaló que para "fortuna" de su partido no se trataba de ninguno de sus militantes, ya que están cansados de denunciar que se les "hostigue" en las manifestaciones que convocan.

"No entendemos que en este país un sector político tenga que pedir todo tipo de permisos para que se nos legalice y el supuesto sector contrario, que resulta que es el sector político afín al Gobierno contra el que protestamos, no necesite ningún tipo de permiso y pueda concentrarse ilegalmente", agregó.

Por otra parte, cuestionó que el presunto agresor del fallecido hubiese acudido a la manifestación, ya que al tratarse de un soldado se arriesgaba a ser expulsado del Ejército. "Se me hace extrañísimo, pero no hace falta tener demasiada cultura política para saber que cualquier persona que participe en una manifestación siendo militar se arriesga a ser expulsado del Ejército", subrayó.

CRÍTICAS A LOS MEDIOS.

En este sentido, reiteró que no se trataba de uno de sus militantes y dijo que el soldado fue agredido "en una proporción de 20 a 1". "No se puede hacer un linchamiento de una persona y luego el proceso contrario, la beatificación de uno de los agresores, cuando la versión que ellos cuentan en sus páginas web es muy distinta a la que vosotros dais", criticó en alusión a la información publicada en los medio.

Finalmente, sostuvo que el "único" responsable de la muerte del menor era "el PSOE y la Delegación del Gobierno" en Madrid, porque no pusieron los medios efectivos necesarios en la reyerta. "Había tres ambulancias y 16 agentes en nuestra manifestación para frenar los ataques. Los antifascistas pactaron con la Policía la disolución de nuestra manifestación, que cedió y llevó a cabo la disolución", concluyó.