Foto: UNMISS
MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
Médicos Sin Fronteras ha alertado este martes de que la desnutrición infantil se ha disparado en Sudán del Sur en la primera mitad de 2014, hasta el punto de que el nivel de menores atendidos por la organización supone ya un 75 por ciento de las cifras totales con las que se cerró el año pasado.
De enero a junio de 2014, 13.270 niños, en su mayoría menores de cinco años, han sido admitidos en los programas nutricionales de MSF en Sudán del Sur. La ONG ha atribuido este repunte a la violencia desatada en diciembre de 2013, el desplazamiento forzoso de la población y la escasez de comida.
El coordinador general de MSF en Sudán del Sur, Raphael Gorgeu, ha considerado la situación "un desastre de enorme magnitud". "Lo que estamos presenciando aquí es el resultado de seis meses de desastres acumulados que han agravado aún más lo que ya era una situación complicada", ha advertido en un comunicado.
La organización ha recordado que algunas personas llevan desde diciembre "viviendo en el bosque, bebiendo agua sucia y estancada y comiendo raíces para sobrevivir", lo que para Gorgeu es "inaceptable".
TASA DE DESNUTRICIÓN
La tasa de desnutrición se ha disparado en varios lugares de los estados de Alto Nilo, Jonglei y Unidad. En Leer, una localidad situada en este último estado, los equipos de MSF han pasado de atender 40 casos al mes a unos mil.
La coordinadora del proyecto de MSF en Leer, Sarah Maynard, ha explicado que cuando la ONG regresó a Leer en mayo, numerosas personas fueron "directas hacia el hospital" tras pasar meses en el bosque. "Estábamos sobrepasados ante la situación", ha explicado, al hablar de unos "niveles pavorosos".
En Bentiu, también en el estado de Unidad, 239 niños ingresaron muy graves en un centro médico instalado para tratar niños con desnutrición aguda. Al menos 42 de estos menores han perdido la vida, según el balance de la organización.
Por otra parte, en el estado de Jonglei, en zonas como Lankien y Yuai, las admisiones se han disparado en seis meses un 60 por ciento. Así, de 175 ingresos mensuales en 2013 se ha pasado a 290.
MUERTES PREVENIBLES
Una coordinadora de emergencias de MSF, Patricia Trigales, ha alertado de las "condiciones terribles de vida" que se ven obligados a soportar los desplazados, lo que les lleva a morir de "enfermedades prevenibles".
La situación, además, no sólo se circunscribe al interior de Sudán del Sur, ya que miles de personas han cruzado las fronteras para huir de los conflictos. Sólo la región etíope de Gambella acoge a unos 150.000 sursudaneses refugiados y, en esta zona, las tasas de desnutrición agua superan el 20 por ciento y las de desnutrición agua severa el 6 por ciento, muy por encima de los umbrales de emergencia.
MSF ha pedido a las partes enfrentadas que pongan fin a los choques y faciliten la llegada de la ayuda humanitaria y, por otra parte, ha reclamado una mayor implicación a la comunidad internacional para "proporcionar una asistencia humanitaria de forma continuada". "Es absolutamente crucial para aliviar en todo lo posible el sufrimiento que está provocando el conflicto en Sudán del Sur", ha indicado Gorgeu.
El coordinador de la organización en el país africano ha hecho hincapié en que "millones de personas son ahora mismo completamente dependientes de la ayuda humanitaria para sobrevivir y previsiblemente lo seguirán siendo en un futuro a medio plazo".