UNICEF reclama a los líderes políticos de Costa de Marfil que den prioridad a la protección de los niños

MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

UNICEF ha reclamado este martes a los líderes de Costa de Marfil que den prioridad a la protección de los niños durante la etapa de violencia que está sufriendo el país africano y que les aseguren el acceso a los servicios sanitarios y educativos mientras continúa la "inestable situación política".

En un comunicado, la agencia de Naciones Unidas especializada en el infancia ha subrayado que "la tragedia actual puede agravarse, si la inestabilidad política provoca que se desatiendan las enfermedades, que los niños sean explotados o que no puedan ir a la escuela".

"En cualquier crisis o emergencia, la infancia es siempre la más vulnerable. Los líderes nacionales y comunitarios de Costa de Marfil deben asegurar que las personas responsables del bienestar de los niños sean capaces de trabajar y que la infancia no se coloque en la primera línea de la confrontación política", ha dicho.

UNICEF y sus colaboradores están atendiendo las necesidades de los desplazados internos y de aquellos que han cruzado las fronteras hacia Liberia y Guinea. Según sus estimaciones, "más de 28.000 marfileños, de los que más del 75 por ciento son niños y mujeres, se han refugiado en comunidades de Liberia, donde las familias que les acogen ya tenían anteriormente problemas para acceder a alimentos, refugio, agua, saneamiento y servicios sanitarios".

La agencia de Naciones Unidas ya ha distribuido 20 toneladas de suministros en el oeste para asistir a la población necesitada. También ha preparado una campaña contra la fiebre amarilla para evitar que se extienda el brote que está afectando a dos distritos del país y que ya se ha cobrado 25 vidas desde finales de octubre de 2010.

UNICEF ha explicado, además, que el precio de los alimentos se ha incrementado gradualmente en la región occidental del país africano y ha advertido de que la subida "puede afectar la situación nutricional" de los niños de las familias más pobres que se han visto "obligadas a usar sus reservas".