Actualizado 30/05/2012 19:30

La Xunta pidió a la guardería de Vigo que regularizase el aula de bebés, pero cerró tras la intoxicación de los niños

VIGO, 30 May. (EUROPA PRESS) -

La Xunta de Galicia ha explicado este miércoles que en marzo de 2010 detectó que el nuevo aula de bebés de la guardería La Camelia estaba funcionando sin autorización administrativa y se requirió al centro que regularizase la situación, pero después de que varios niños resultaran intoxicados por benzodiacepinas el aula quedó cerrada.

Así lo ha declarado una inspectora de la Consellería de Traballo e Benestar durnate el juicio contra la cuidadora del citado aula acusada de sedar a los 9 bebés que resultaron intoxicados. Según ha dicho, en la inspección realizada el 15 de marzo de ese año se detectó que no tenía la pertinente autorización administrativa.

Fuentes de la Xunta explican que en inspecciones anteriores a esta escuela infantil no se había registrado la irregularidad porque el aula para bebés no estaba en funcionamiento. Tampoco le consta a la Administración gallega que desde el centro se hubiese pedido el permiso para abrir sus puertas.

Así, tras haberse constatado el problema, se requirió a la entidad que regularizase el aula, si bien tras los hechos ocurridos fue cerrada y "nunca más se volvió a abrir".

La Administración autonómica señala que el hecho de que la nueva dependencia estuviese funcionando sin autorización de la Xunta se detectó "cuando se descubrió el problema con los bebés" y, de hecho, recuerda que cuando la inspección llegó al centro ese aula ya estaba precintada por el juzgado.

Durante los tres meses posteriores a los hechos se realizaron inspecciones de seguimiento. Además, en la última visita realizada, en enero de este año, la citada aula seguía sin actividad por lo que, según explica la Xunta, "todo estaba correcto para pasar la inspección".