ROMA 18 Mar. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Gloria Moreno) -
Una operación conjunta de la Interpol y las Policías italiana, eslovaca y checa ha logrado desarticular una red de tráfico de personas responsable de introducir en distintos países de Europa a cientos de inmigrantes indocumentados procedentes de India, Pakistán y Afganistán.
Los inmigrantes eran conducidos a Rusia y luego a Ucrania, Hungría, Rumanía y Eslovaquia, desde donde los traficantes les introducían clandestinamente y en condiciones inhumanas en camiones que los introducían en Italia.
Una vez en el país transalpino, los inmigrantes intentaban buscarse un futuro allí o decidían trasladarse a otros países europeos, como España, Francia, Bélgica y Reino Unido.
Las investigaciones empezaron en 2007 en la provincia de Udine (norte de Italia) a raíz de la llegada masiva de inmigrantes procedentes de Pakistán, India y Afganistán. Desde entonces, los cuerpos policiales de los distintos países involucrados realizaron algunas detenciones. No obstante, la operación culminó hoy con la detención de los últimos ocho sospechosos.