Actualizado 05/07/2015 00:12

Isabel García Tejerina: "España no va a quedarse atrás en el reto de la lucha contra el cambio climático"

La ministra Isabel García Tejerina, durante su intervención en las Jornadas.
CLUB ESPAÑOL DE LA ENERGÍA


MADRID, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -

La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha asegurado que España "no va a quedarse atrás" en el reto que constituye la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) con vistas a la lucha contra el cambio climático

Así lo ha señalado en el acto inaugural de las Jornadas 'Propuesta de la Comisión Europea para un marco político en materia de Clima y Energía en 2030', que han sido organizadas por la Asociación Española para la Economía Energética (AEEE) y el Club Español de la Energía este martes en la Fundación Ramón Areces (Madrid) con el patrocinio de CEPSA y KPMG.

García Tejerina, que ha comenzado su intervención manifestando su "dolor" por el fallecimiento el pasado domingo del presidente de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez, ha señalado que la Unión Europea se encuentra en un momento en el que deben ser tomadas decisiones de "gran trascendencia" para transformar los modelos energéticos y productivos y proporcionar, a través de propuestas como la que preside las Jornadas, un ámbito de acción a nivel comunitario en el que se desarrollen de "forma coherente y reforzada" las políticas de clima y energía, "dos caras de una misma moneda".

De esta forma, según ha añadido, las instituciones europeas llegarían en "buena posición negociadora" de cara a citas como la Cumbre del Clima organizada por Naciones Unidas en su sede central de Nueva York el próximo 23 de septiembre; un encuentro que la ministra ha calificado de "cita política sin precedentes" y al que acudirá en representación española junto con los Reyes y el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo.

En este sentido, se ha referido también a la Cumbre sobre Clima programada en París en 2015 y de la que el Gobierno "confía" que salga un "gran acuerdo" que "debería ser jurídicamente vinculante" para todos los actores implicados, estableciendo así "un antes y un después" en la lucha contra el cambio climático.

En el caso particular de España, García Tejerina ha recalcado que el Gobierno "va a continuar" con la línea iniciada al comienzo de la legislatura y que "ha supuesto un auténtico vuelco" en la política de cambio climático en España. El objetivo es alcanzar un compromiso "efectivo" hacia la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero y evitar así que la "única contribución" del país en esta línea sea la compra de derechos de emisión en terceros países.

A su juicio, la lucha contra el calentamiento global no solo es una responsabilidad para las administraciones públicas y la sociedad sino también una "oportunidad que hay que aprovechar" como base de un desarrollo sostenible, "capaz de crear empleo". En este sentido, ha aludido a los "más de 4 millones de puestos de trabajo" que, según Eurostat, han sido creados desde 2008 gracias a la introducción de las políticas dirigidas al cumplimiento de los objetivos en materia de energía y clima de la Comisión Europea (CE).

40% MENOS DE EMISIONES PARA 2030

Este acto ha tenido lugar cuando están a punto de cumplirse ocho meses de la presentación de la 'Propuesta para un marco político en materia de Clima y Energía en 2030' por parte de la CE el pasado 22 de enero. Según explicó entonces el organismo, el objetivo de esta iniciativa es el impulso de un marco político para el avance de la Unión Europea hacia una economía baja en emisiones de carbono así como un sistema energético más "competitivo y seguro", que reduzca la dependencia a nivel comunitario de las importaciones de energía.

De este modo, el plan prevé, para 2030, un objetivo vinculante de reducción del 40 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a las cifras de 1990. Para ello, propone que el techo de emisiones descienda un 2,2 por ciento anual entre los sectores cubiertos por Régimen de Comercio de Derechos de Emisión (RCDE) de La Unión Europea y que, para aquellos no cubiertos, las emisiones caigan un 30 por ciento con respecto a 2005, una disminución que deberá repartirse "de forma equitativa" entre los 28 Estados miembro.

El documento fija otro objetivo vinculante de "al menos" un 27 por ciento de energías renovables con el fin de asegurar la continuidad de las inversiones en este sector que, no obstante, no se traducirá en objetivos nacionales. En cambio, la Comisión permitirá a cada país "flexibilidad" para desarrollar sus propios planes energéticos nacionales, adaptados a las "circunstancias y preferencias" de cada Estado.

La Comisión propone también una "mejora" en la eficiencia energética de los Estados de la UE, cuyo papel de cara a 2030 será analizado "con mayor profundidad" en el marco de la revisión, antes de que termine 2014, de la Directiva europea existente sobre esta cuestión. Además, se introducirá una serie de indicadores sobre aspectos relativos a la energía como las diferencias de sus precios de cara a los principales socios comerciales, la diversificación del suministro o el potencial de interconexión entre los Estados miembros, entre otros.