MADRID 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Al menos 28 personas han muerto por cólera o por diarrea acuosa aguda en Afganistán durante los dos últimos meses, según ha informado el Ministerio de Sanidad Pública de este país, que señala que también se han registrado 673 casos de cólera en once de las 34 provincias de Afganistán.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cólera, que no es común en Afganistán, es una infección diarreica aguda causada por la ingestión de la bacteria vibrio cholerae. La enfermedad se caracteriza en su forma más grave por una aparición repentina de diarrea acuosa aguda que puede llevar a la muerte por una deshidratación grave y por fallo renal.
El ministro de Sanidad, Mohamad Amin Fatimie, declaró durante una rueda de prensa el pasado 12 de septiembre, que el Ministerio que dirige depende de las ONG y de las agencias en lo referente a la ayuda, aunque subrayó que "no hay un brote de cólera sino unos cuantos casos, y el Ministerio de Sanidad es capaz de diagnosticar y controlar el cólera".
Sin embargo, los responsables sanitarios de la provincia de Samangan, en el norte, han pedido ayuda de emergencia para frenar un posible brote de cólera en el distrito de Dara e Sof. "Durante los tres últimos días, el cólera ha matado a cinco personas en Dara e Sof. A menos que implantemos medidas preventivas de manera urgente, podría extenderse a otras zonas", afirmó el director del departamento de Sanidad de Samangan, Abdul Hameed.
El Ministerio de Sanidad también afirmó que los suministros médicos, incluidos los antibióticos y los sobres con sales para la rehidratación, han sido ya enviados a las provincias afectadas por cólera y se enviarán más si son necesarias.
La enfermedad también ha sido detectada en la provincia de Nangarhar, en el este, donde las inundaciones del pasado 31 de agosto han afectado a 4.000 personas, según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), quien alertó sobre un brote de malaria causado por las aguas estancadas.
Por otro lado, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) estima que sólo el 23 por ciento de los 27 millones de afganos tiene acceso a agua potable y el doce por ciento a una sanidad segura, una cuestión vital para que no infectarse de estas enfermedades. UNICEF también indica que más de 50.000 niños mueren anualmente de enfermedades diarreicas.