Actualizado 13/04/2009 21:54

Empieza la fase de reconstrucción una semana después del terremoto que sacudió L'Aquila (Italia)

El 50% de los edificios inspeccionados hasta el momento no son habitables o presentan problemas


ROMA, 13 Abr. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, G. Moreno) -

Una semana exacta después del terremoto que en la madrugada del pasado lunes sacudió el centro de Italia, los habitantes de la región de Abruzzo intentan recomenzar sus vidas y dejar atrás el balance de la tragedia, que asciende a 294 muertos, más de mil heridos y cerca de 50.000 evacuados. Entretanto, la lluvia, el viento y el frío caracterizaron la jornada de hoy en la zona del seísmo, donde los servicios de Protección Civil están intentando suministrar a los damnificados estufas y mantas para calentarse.

Estas circunstancias hacen todavía más difícil la ya precaria situación en que se encuentran los más de 25.000 evacuados que se han quedado sin casa y están viviendo en campamentos provisionales. Otros 21.200 ciudadanos han sido acogidos en hoteles, a los que se suman las numerosas familias que buscaron refugio en casa de parientes o conocidos, lejos de la zona afectada por el seísmo.

Mientras, la región sigue temblando a causa de las innumerables réplicas del terremoto, que además de atemorizar todavía más a la población, generan nuevos derrumbes en los edificios dañados.

Según los datos del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), a lo largo de esta semana han sido contabilizados unos 10.000 temblores, aunque sólo un millar de ellos superaron los 2,5 grados en la escala de Richter y pudieron ser percibidos por la población.

A pesar de ello, el servicio de Protección Civil dio hoy por terminada la fase de emergencia y anunció el inicio de la fase de "asistencia y reconstrucción". Por esta razón, equipos de técnicos especializados están supervisando todos los edificios para verificar si podrán volver a ser habitados o no. El objetivo es conseguir lo antes posible que los evacuados puedan volver a sus casas o puedan ser alojados en condiciones más adecuadas que las tiendas de campaña en que se encuentran hasta ahora.

Hasta el momento, ya han sido efectuadas cerca de un millar de inspecciones a través de las que el 30% de los edificios ha sido declarado inhabitable, un 20% parcialmente inhabitable y un 50% habitable.

De hecho, uno de los aspectos que más sorprende de esta tragedia es la gran cantidad de edificios que se desplomaron o quedaron seriamente dañados, tanto públicos como privados, tanto nuevos como antiguos e incluso construcciones realizadas bajo supuestos criterios antisísmicos.

INVESTIGACIÓN POR DESASTRE CULPOSO

La semana pasada, el presidente de la República, Giorgio Napolitano, no dudó en pedir "responsabilidades" a quienes podrían haber evitado esta tragedia y no lo hicieron. Por su parte, la Fiscalía de L'Aquila ha abierto una investigación contra desconocidos por desastre culposo y homicidio múltiple culposo.

Tras el hallazgo de los últimos cuerpos, prosiguen los funerales de las víctimas. Las dos últimas fueron enterradas esta mañana en la pequeña localidad siciliana de Buscemi (sur). También hoy, estaba prevista la repatriación de los restos mortales de tres ciudadanos rumanos, miembros de una sola familia.

Ayer, se celebraron las exequias de otras cuatro víctimas, tres de ellas también pertenecientes a una misma familia. Los cuerpos fueron hallados bajo los escombros de uno de los edificios de la calle XX Settembre de L'Aquila, que había quedado completamente destrozado.

Además de las 294 víctimas mortales y las miles de personas que se han quedado sin techo, el terremoto ha causado ingentes pérdidas culturales y artísticas. Por esta razón, equipos especializados están intentando recuperar algunos de estos tesoros, como es el caso de la orfebrería de la catedral de L'Aquila, que ha quedado parcialmente derribada.

La intención del Gobierno que dirige Silvio Berlusconi es pedir ayuda a los países extranjeros para la recuperación del patrimonio artístico dañado. Entre otros monumentos, figura la Fortaleza Española, que fue erigida en tiempos de Carlos V y para cuya reconstrucción el Gobierno español ya se ha mostrado dispuesto a colaborar.

Después de haberse desplazado diariamente a la zona del terremoto, Berlusconi se retiró hoy a Villa Certosa, la residencia de verano que posee en la isla de Cerdeña (oeste) donde permanecerá algunos días para descansar, según informaron hoy los medios italianos.