MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, anunció este jueves que la labor de su Departamento se centrará a partir de ahora en intentar mitigar los efectos de la pandemia de gripe A frente a la actuación prioritaria de protección que se realizaba hasta ahora, tras la decisión de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de declarar el nivel seis de alerta, el más alto.
"En esta fase seis no se trata tanto de evitar la propagación de un virus que ya circula libremente por todo el mundo, sino de evitar el impacto negativo en la población. Pasamos de la contención a la mitigación,", recalcó la ministra de Sanidad en una rueda de prensa en Madrid.
Tras indicar que el número de casos confirmados en España es de 488, 139 de ellos detectados en 22 centros escolares de la Comunidad de Madrid, Jiménez pidió "tranquilidad" a la población, ya que la declaración de pandemia no supone que un incremento de la gravedad de la enfermedad, sino una mayor extensión del virus.
De esta manera, la ministra de Sanidad subrayó que no es recomendable cerrar espacios públicos en los que se haya registrado casos sospechosos de haber contraído la enfermedad, ni tampoco cerrar fronteras o limitar los viajes. "La OMS no recomienda cambios en la vida cotidiana", puntualizó.
Por otro lado, Jiménez indicó que tras la decisión de la OMS, las autoridades sanitarias priorizarán la "investigación" sobre cómo se comporta el virus e indicó que la información puntual sobre número de afectados ya no será permanente.
En este sentido, explicó que se realizarán análisis de "casos seleccionados", que darán una muestra "precisa" para calcular la tasa de infección general y destacó que los recursos se concentrarán principalmente a la atención de afectados y no tanto a la detección de casos.
Asimismo, la ministra anunció que el lunes se reunirá el Comité Ejecutivo Nacional para la Prevención, el Control y el Seguimiento de la Evolución Epidemiológica del virus de la gripe A, en la que participarán representantes del Ministerio y de tres comunidades autónomas.
EMPLEO DE FÁRMACOS "CONVENCIONALES"
La ministra de Sanidad recordó que "muchos" de los casos confirmados ya han sido dados de alta, teniendo en cuenta que la enfermedad dura "unos tres días", y que la mayoría de los infectados han sido tratados en sus domicilios con medicación convencional, como analgésicos y antitérmicos, reservando el empleo del tamiflú a grupos de riesgo.
"No queremos un uso extendido del tamiflú para evitar que el virus se haga inmune", puntualizó la ministra, tras destacar la importancia de la higiene y de la precaución a la hora de estornudar o toser "como en el caso de la gripe convencional".
A pesar de ello, Jiménez recordó que España cuenta con 10 millones de tratamientos antivirales, que son "más que suficientes" según los protocolos. Asimismo, en otoño todas las comunidades autónomas contarán con las vacunas "necesarias".
Precisamente a este respecto, la ministra de Sanidad informó de que ha pedido a la Comisión Nacional de Salud Pública que determine cuál es la población a la que se debe vacunar y el porcentaje de vacunas que España debe comprar.
Jiménez indicó que si se tuvieran en cuenta las características de la gripe común, se debería vacunar el 30% de la población española, entre los que se encontrarían las personas mayores, los niños o los afectados por enfermedades de tipo respiratorio.
No obstante, según los datos de la ministra, los más afectados por el virus de la gripe A son jóvenes de una edad media de 20 años, en un 60% de los casos varones, que sufren síntomas "similares" a las infecciones gripales leves.