Actualizado 19/12/2007 20:34

Greenpeace, AI, Intermón y Fundación per la Pau celebran la aprobación definitiva de la Ley de Comercio de Armas

Instan al Gobierno a cumplir "escrupulosamente la ley" y recuerdan que el comercio descontrolado de armas causa "una muerte cada minuto"


MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI), Fundació per la Pau, Greenpeace e Intermón Oxfam celebraron este miércoles la aprobación definitiva en el Senado de la Ley de Comercio de Armas tras "más de diez años de campaña por un mayor control y transparencia del comercio español de armas". A juicio de las organizaciones no gubernamentales, esta ley supone "un avance importante para poner fin al enorme coste humano que tienen las transferencias irresponsables de armas", ya que, advirtieron, "el comercio descontrolado de armas causa en el mundo una muerte cada minuto".

El Pleno del Senado aprobó esta tarde por asentimiento el proyecto de Ley de Control de Control de Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso, que aumentará el control parlamentario sobre las exportaciones y la información que está obligado a aportar el Gobierno al Parlamento. Durante la tramitación parlamentaria, todos los grupos parlamentarios y el Gobierno reconocieron el papel 'protagonista' de las cuatro organizaciones en la consecución de la nueva norma e incorporaron al texto final buena parte de las enmiendas que les propusieron.

"La ley sobre el control del comercio exterior de material de defensa y de doble uso obligará al Gobierno a aplicar los criterios del Código de Conducta de la Unión Europea que no permiten transferencias de armas a países en conflicto o donde se violen los Derechos Humanos, entre otras limitaciones", afirmaron las ONG en un comunicado.

Las cuatro organizaciones instan al Gobierno "a cumplir escrupulosamente con el espíritu y la letra de la nueva ley, incluyendo el envío de información puntual y detallada al Parlamento sobre qué material de defensa exporta España y a qué destinos". Las organizaciones recuerdan que todavía está pendiente el envío al Congreso de las estadísticas de exportaciones del primer semestre de 2007.

ASPECTOS POSITIVOS Y NEGATIVOS

Entre los aspectos más positivos de la ley, según las ONG, destaca la prohibición de la venta de armas "a países en conflicto, donde se violen los Derechos Humanos o que estén sometidos a embargos internacionales". "En el momento de denegar una transferencia a un país se tendrán en cuenta los informes de organismos de Naciones Unidas en materia de Derechos Humanos, así como los de organizaciones y centros de investigación sobre paz, desarme y Derechos Humanos", señalan.

Aparte, entre los documentos de control que se deben adjuntar a las solicitudes de exportación, "se incluyen cláusulas de no reexportación, por las que el país receptor se compromete a no vender o transferir estos productos a un tercer país". También debe incluirse la información sobre países de tránsito y métodos de transporte, "una medida importante para evitar 'desvíos' de armas", según las ONG. La ley, establece que se podrán denegar esas autorizaciones cuando se trate de países sobre los que hay evidencia de desvío de armas.

Aparte, el Gobierno se compromete a promover y a apoyar la prohibición de las bombas de racimo y establece el compromiso de apoyar la aprobación de un Tratado Internacional sobre Comercio de Armas.

"En materia de transparencia", prosigue el comunicado, "se elimina la referencia a la Ley de Función Estadística Pública, que era hasta ahora el principal argumento eximido por el Gobierno para no ofrecer mayor información pública sobre el tipo de producto exportado". "Este cambio abre la puerta a que parlamentarios y ciudadanos dispongamos de información detallada de qué material de defensa y doble uso exporta España", manifiestan las cuatro ONG.

Otro avance de la ley, según el comunicado, es que se amplia el control parlamentario. "El Congreso, además de recibir semestralmente y anualmente la información relativa a las exportaciones oficiales, tendrá capacidad para evaluarla a través de un dictamen con recomendaciones, a las que el secretario de Estado deberá dar respuesta en su comparecencia anual", se lee en el texto.

No obstante, advierten las cuatro organizaciones, la ley mantiene aspectos negativos. Por ejemplo, en materia de transparencia, "la ley no menciona de forma explícita la obligación del Gobierno de dar información detallada del producto exportado, haciendo únicamente referencia a 'categorías descriptivas'".

Aparte, la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (JIMMDU, el organismo interministerial que autoriza o deniega las autorizaciones) "conserva la capacidad de eximir a los exportadores de la presentación de los documentos de control en ciertos casos". En todo caso, las ONG consideran "positivo" que la ley incluya la obligación del Gobierno de informar sobre los criterios utilizados en la aplicación de las exenciones.

Otro aspecto negativo de la ley, según las ONG, es que "no contempla la obligatoriedad de documentos de control como el certificado de destino y uso final". Asimismo, "en materia de intermediación o corretaje, no se aplica el principio de extraterritorialidad, que ampliaría su ámbito de aplicación a los nacionales o residentes españoles que operen desde el extranjero".

MÁS DE DIEZ AÑOS DE CAMPAÑA

Según las ONG, esta ley es el resultado de más de diez años de campaña para exigir mayor transparencia y control de las exportaciones españolas. "Hace poco más de una década, la información relativa al comercio exterior de material de defensa era secreta y las transferencias de armas no estaban sujetas al control político ni de la opinión pública", afirman.

"La toma de conciencia de los ciudadanos y el trabajo de diferentes organizaciones y de distintas fuerzas políticas parlamentarias han permitido combatir el secretismo y avanzar hacia una mayor transparencia y control", prosiguen. "Desde el lanzamiento de la campaña, cientos de miles de personas y decenas de instituciones han apoyado esta petición", aseguran las ONG.

"Amnistía Internacional, la Fundació per la Pau, Greenpece e Intermón Oxfam valoran positivamente las modificaciones añadidas al texto inicial aunque lamentan que no se haya conseguido el consenso necesario en el Congreso para que la ley obligue explícitamente al Gobierno a dar información detallada sobre el tipo de producto exportado", se lee en el comunicado.

"Por ello, las cuatro organizaciones darán seguimiento al desarrollo reglamentario de esta ley y a su aplicación para que suponga un verdadero avance en materia de control y transparencia de las exportaciones españolas de armas e impida transferencias irresponsables", advierten las ONG.

VENTA DE ARMAS

Según los últimos datos oficiales, España vendió el pasado año material de defensa por valor de más de 845 millones de euros, "lo que le sitúa en el octavo puesto entre los mayores exportadores de armas del mundo", según el comunicado.

España vendió 441.000 euros en material de defensa a Israel, un millón de euros a Pakistán, más de 16 millones de euros a Marruecos y más de tres millones de euros a Venezuela. El informe oficial explica que España ha vendido a estos países productos de distinto tipo, entre los que figuran los de la categoría 4, correspondiente a "bombas, torpedos, cohetes y misiles". "Sin embargo, no se conoce con precisión qué se exporta y en qué cantidad", lamentan las organizaciones.

En el caso de Marruecos, los datos oficiales ofrecieron información solamente sobre la mitad de las ventas, de las que se dice que son "vehículos todo terreno para transporte". En relación con las ventas de material y tecnologías de doble uso, afirma el comunicado, entre los destinatarios figuran países como Irán, Colombia, China o Israel. "Estos destinos difícilmente cumplirían con los requisitos establecidos por la ley para autorizar una exportación de armas", advierten.