Actualizado 01/07/2009 15:17

Más de 3.000 personas han muerto en las regiones tribales a causa de las actividades de los extremistas


ISLAMABAD, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

Más de 3.000 personas han muerto y otras tantas han resultado heridas en las Áreas Tribales Administradas Federalmente (FATA, por sus siglas en inglés) a causa de las actividades que los grupos extremistas llevan a cabo desde hace unos años en estas regiones paquistaníes fronterizas con Afganistán, que además han sufrido unos daños materiales valorados en 2.000 millones de dólares (1.420 millones de euros), según un informe publicado por la Secretaría de las FATA.

El informe, de 21 páginas, indica que la región más castigada por las actividades de milicianos y terroristas es Bajaur, con 600 fallecidos, mientras que en Kurram, Waziristán del Norte y Waziristán del Sur se han producido unas 500 víctimas en cada una.

En cuanto a las pérdidas económicas, las relativas a la propiedad ascienden a 103 millones de dólares (73 millones de euros), las que afectan al sector económico son de 119 millones (84,5) y las de carácter social suman 109 millones (77).

Asimismo, el sector agrícola ha experimentado unas pérdidas de 188 millones y los gastos de atención a las personas desplazadas por la violencia ascienden a unos 572 millones de dólares (406 millones de euros). El informe, recogido por GEO TV, calcula que se necesitan unos 2.000 millones (1.420) para reconstruir y rehabilitar las zonas tribales.

Por otro lado, el estudio revela que mientras los milicianos disponen de las armas más modernas, el armamento que utilizan las fuerzas de seguridad de las FATA está desfasado y es insuficiente. Además, los miembros de las fuerzas gubernamentales cobran 3.500 rupias al mes (casi 31 euros), bastante menos que los insurgentes, que reciben entre 10.000 y 15.000 (entre 88 y 132 euros), una diferencia que, según el informe, explica la inestabilidad de las regiones tribales.