MADRID 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
La ONG Save the Children ha advertido este viernes de que al menos 48,5 millones de niños y niñas en todo el mundo no pueden asistir a la escuela a causa de los conflictos armados y ha destacado que las barreras para acceder a la educación, las agresiones físicas o el reclutamiento por parte de grupos armados, han aumentado "rápidamente" en el último año.
En el informe publicado este viernes, la organización ha indicado que, de los 48,5 millones de niñas y niños que viven en zonas de conflicto y que se encuentran sin escolarizar, más de la mitad está en edad de enseñanza primaria.
Save the Children ha hecho público el documento, en el momento en el que la activista paquistaní de 16 años Malala Yousafzai, quien fue atacada el pasado mes de octubre por los talibán, se ha dirigido a la Asamblea General de la ONU para ofrecer su primer discurso público desde que sufrió el ataque.
Aparte, la ONG también ha recordado que desde el inicio del conflicto en Siria, hace más de dos años, se han destruido, dañado u ocupado con fines ajenos a la educación alrededor de 3.900 escuelas, según cifras proporcionadas en enero de 2013 por UNICEF y en diciembre de 2012 por el Ministerio de Educación sirio, entre otros.
El responsable de Programas Internacionales de Save the Children, David del Campo, ha aseverado que "en algunas de las regiones más inhóspitas del mundo, la educación brinda a la infancia la oportunidad de un futuro más prometedor".
"Las aulas deberían ser lugares seguros y protegidos, y no campos de batalla donde los niños y las niñas son víctimas de los delitos más terribles. La infancia que es blanco de estos actos pagará el precio durante el resto de sus vidas", ha proseguido.
Por otro lado, la directora del Informe de Seguimiento en el Mundo Pauline Rose, ha afirmado que "los conflictos están frenando el progreso, impidiendo que millones de niños y niñas asistan a la escuela cada año". "Una gran parte de esa infancia afectada nunca reanudará su educación y quedará marcada de por vida, tanto física como psicológicamente", ha agregado.
EXPERIENCIAS
"Estoy en noveno grado, pero por culpa de esta guerra no he podido graduarme. Ya tendría que haber terminado e iniciado la enseñanza secundaria para comenzar a construir mi futuro, pero no, mi futuro ya está destruido", ha declarado Motassem, un niño de 13 años de Siria.
A su vez, Salif, de 13 años y natural de Malí, ha descrito cómo fue el día en el que los insurgentes llegaron a su colegio. "El día en que llegaron los combatientes, destruyeron la escuela. Entraron en la oficina del director y destruyeron todo, incluidos los exámenes de todos los alumnos".
"Las guerrillas se acercan a la gente joven del pueblo con el objetivo de reclutarla. Hace cuatro meses, a mi prima la engañaron para que se fuera con ellos y desde hace un mes, no he sabido nada de ella", ha relatado Paula, una joven colombiana de 15 años.
Save the Children ha instado al conjunto de líderes mundiales a que aborden esta crisis y se comprometan a "proteger la educación", castigando los ataques que se produzcan contra ella, la "prohibición de la utilización de las escuelas por parte de grupos armados" y a trabajar "con las escuelas y las comunidades para adoptar medidas a nivel local dirigidas a conservar las escuelas como centros de estudios, especialmente durante los conflictos", entre otras medidas.