VALENCIA, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
Caja Mediterráneo, a través de su programa CAM Integra, apoyó durante el pasado curso escolar a la ONG Casal de la Pau, en su labor de acompañar durante el proceso de inserción sociolaboral de 50 personas reclusas y ex reclusas en situación de extrema vulnerabilidad, sin apoyos sociales y familiares.
Según informa la entidad en un comunicado, el apoyo se basa en las labores de búsqueda de vivienda y empleo, como paso fundamental para lograr la inserción social de estas personas.
El Casal de la Pau, que nació en 1972, cuenta con más de 70 voluntarios agrupados en diferentes programas. La ONG apoya y colabora con las personas en función de sus características y su situación personal, jurídica, sanitaria o social, a través de programas transversales de atención sanitaria, asesoramiento jurídico y actividades socioculturales.
Además, 13 profesionales, entre trabajadoras sociales, educadoras, enfermera, auxiliar y monitores, coordinan la labor de los voluntarios en las tres grandes líneas de trabajo del Casal de la Pau.
En concreto, se trata del programa de 'Residencia o de Atención a Liberados Condicionales por Enfermedad', que son personas que, tras salir de prisión, se encuentran con un gran deterioro de salud y el objetivo fundamental es intentar mejorar, estabilizar y conseguir las mejores condiciones y calidades de vida.
El programa 'Albergue', es de acogida para las personas que carecen de avales familiares y no pueden disfrutar de los permisos penitenciarios, así como para quienes se encuentran en libertad condicional o definitiva y terceros grados.
La finalidad es iniciar un proceso que calificaron de "reconstrucción" y de "inserción social, que no cuenta con un tiempo definido, puesto que cada persona tiene unas necesidades y un ritmo propio".
El proyecto de pisos y laboral, por su parte, está pensado y destinado a las personas que van logrando mayor autonomía con el fin de darles el apoyo necesario para lograr trabajo y habitación o piso compartido. Una vez logrado, se realiza un seguimiento con el fin de que el Casal "quede como referente afectivo a todos los niveles, así como un apoyo y ayuda".
