Actualizado 04/11/2009 13:44

Acción contra el Hambre interviene de emergencia en Malí para atender a 16.500 personas en riesgo de desnutrición


MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

Acción contra el Hambre ha intervenido de emergencia en Malí para atender a 16.500 personas en riesgo de desnutrición debido a la sequía, y para formar a las mujeres con el objetivo de que puedan cultivar en el próximo período de escasez.

En concreto, la organización ha abierto 21 puntos de distribución en la región para atender a 2.700 familias, y hasta diciembre distribuirán, dos veces al mes, 30 kilos de mijo y tres litros de aceite, así como papilla terapéutica a cada familia con un menor de tres años, según explicó Samantha Sarria, responsable de seguridad alimentaria del Equipo de Emergencias de Acción contra el Hambre.

En este sentido, el organismo destacó que "la desnutrición aguda ha llegado a alcanzar al 15,9% de los menores de cinco años, cuando la Organización Mundial de la Salud sitúa en el 15% el umbral de emergencia".

Al mismo tiempo, la ONG ha puesto en marcha unas clases formativas para que las mujeres aprendan a cultivar productos hortícolas de temporada. "Les damos semillas para que puedan construir una reserva que podrán utilizar en el próximo periodo de escasez, y utilizamos un sistema de riego gota a gota para optimizar al máximo el poco agua disponible", detalló Ali Oumar Maïga, responsable del programa de Acción contra el Hambre.

Además, la organización cuenta con la financiación de la oficina de cooperación británica para el desarrollo (DFID), que ha destinado 400.000 euros a esta operación y ha creado un Fondo de Respuesta Humanitaria para África Occidental.

LLUVIAS TARDÍAS Y ERRÁTICAS

Entre los motivos de la escasez que ha golpeado a Malí se encuentran las lluvias que, según explican desde la organización, "se han retrasado este año un mes y medio y han llegado de forma errática, provocando inundaciones en algunos puntos, mientras en otros no ha caído una sola gota".

"Desde mediados de los ochenta el sol está cada vez más cerca de nuestras cabezas, hace cada vez más calor y nuestros animales terminan muriendo antes de que llegue la lluvia", expresó Mohammed Al Karim, nómada tamasek del norte de Malí.

Además, la leche del ganado "que había conseguido mantener en buen estado de salud a los niños de estos pueblos nómadas" se ha reducido pues "prácticamente la totalidad de los habitantes de la región han perdido al menos la mitad de su ganado, incluso camellos y asnos, los más resistentes", según indicaron.

Así, ante la falta de pastos, los tamasek han optado por comprar forraje para sus animales, por un precio multiplicado por cuatro o por vender, "que tampoco es una buena solución", según afirmó la ONG. "He tenido que dar cinco cabras por un saco de mijo, cuando normalmente tenía que entregar sólo una", aseguró Aramat, cuya hija Aloushna, de siete meses, está recibiendo tratamiento en uno de los centros nutricionales financiados por DFID.

Acción contra el Hambre es una organización internacional no gubernamental, privada, apolítica, aconfesional y no lucrativa, creada en 1979 para intervenir en todo el mundo. Su vocación es luchar contra el hambre, la miseria y las situaciones de peligro que amenazan a hombres, mujeres y niños indefensos (www.accioncontraelhambre.org).