Actualizado 16/07/2010 18:10

ACNUR afirma que todavía hay al menos 75.000 desplazados en Kirguistán un mes después de la crisis


MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

Al menos 75.000 personas siguen desplazadas en Kirguistán un mes después de que estallara la crisis interétnica en el país, según afirmó este viernes el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que señaló que miles de personas siguen afectadas por la falta de seguridad, los problemas que surgen por la pérdida de documentos personales y por la falta de refugio.

En las ciudades de Osh y Jalalabad la situación está en calma, pero hay decenas de policías en los puestos de control, y las dos ciudades siguen bajo un toque de queda nocturno. "En el momento más álgido de la crisis, estimamos que hubo 400.000 afectados; hoy, el número de desplazados que aún necesita ayuda asciende a los 75.000, incluidos los que tienen miedo a regresar o son incapaces de hacerlo porque sus casas han sido destruidas", aseguró la portavoz de ACNUR, Melissa Fleming, quien indicó que también hay acusaciones frecuentes de acoso policial.

"La pérdida de documentos personales, por ejemplo los certificados de nacimiento, pasaportes, tarjetas de identificación y documentos que muestran la pertenencia legal de casas o tierra, está demostrando ser debilitante", explicó.

La portavoz también detalló que, al carecer de papeles que confirmen sus identidades, se enfrentan a problemas para solicitar nuevos, situaciones extendidas ahora en el país. "ACNUR y sus socios están visitando a las comunidades para aconsejar a la gente sobre sus derechos y la forma de conseguir documentación", indicó.

Respecto a las necesidades de refugio, esta agencia indicó que cada vez hay un número mayor de personas que espera rehabilitar sus hogares. "Aunque las comunidades pueden hacerlo, la cantidad de trabajo es sustancial, y es vital la asistencia del Gobierno y de la comunidad internacional", añadió.