NUEVA YORK, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) espera que tan sólo un tercio de los alrededor de 30.000 chadianos que se han refugiado en Camerún huyendo de los recientes combates en su país regresen a sus hogares, por lo que se están elaborando planes para prestar protección y asistencia en los próximos meses a unos 20.000 refugiados
Según el representante local de ACNUR, Jacques Franquin, alrededor de 30.000 chadianos están actualmente en Kousséri, en el noreste de Camerún, de los que sólo una tercera parte podría regresar a sus hogares próximamente, si no se reanudan los combates entre los rebeldes y el Gobierno del presidente Idriss Déby.
"Esperamos que ese número permanezca en Camerún medio plazo", afirmó Franquin. "Ahora estamos trabajando con nuestros donantes para garantizar fondos con el fin de que podamos prestar la protección y la asistencia necesaria", añadió el responsable, en un comunicado de la ONU.
Este fin de semana ACNUR y sus socios humanitarios comenzarán oficialmente a registrar a los nuevos refugiados y ofrecerán a algunos de ellos transporte a un campamento cercano a la localidad de Maltam, a unos 32 kilómetros de Kousséri.
Por su parte, la representante en Camerún del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), Silvia Luciani, indicó que a partir de hoy se comenzará a vacunar contra el sarampión y la polio a unos 44.000 niños refugiados y de las comunidades locales que les están recibiendo.
Asimismo, UNICEF ha suministrado 48.000 litros de agua potable a los refugiados al día desde el pasado sábado, cuando el Programa Mundial de Alimentos (PAM) comenzó la distribución de alimentos.
Pese a que todavía algunas personas están cruzando el puente fronterizo entre Kousséri y Yamena, capital de Chad, en ambos sentidos, la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) indicó que el flujo de refugiados prácticamente ha cesado.
