MADRID, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha lanzado este jueves una campaña para evitar la apatridia --situación en la que se encuentran las personas que no tienen una nacionalidad--, que actualmente afecta a más de doce millones de personas en el mundo y que es "un problema particularmente acuciante" en el sudeste de Asia, Asia Central, el Este de Europa y Oriente Medio.
Según informa ACNUR, que advierte de los problemas que hay para definir "el número exacto" de apátridas, estas personas se distribuyen en grupos a lo largo del mundo "y es un problema que cruza todas las fronteras y ámbitos de la vida". Asimismo, indica que combinando los "inconsistentes" informes con lo que significa ser apátrida "continúa siendo difícil de alcanzar la verdadera magnitud del problema".
Para solucionar el problema de las personas apátridas, ACNUR está intentando crear conciencia acerca de la necesidad de tener una definición jurídica internacional, mientras que en paralelo "está mejorando sus propios métodos" para recopilar datos del número de personas que se encuentran en esta situación. Esta campaña coincide con el 50º aniversario de la Convención para reducir los casos de apátridas (1961).
El Alto Comisionado para los Refugiados Antonio Guterres ha advertido de que "estas personas necesitan ayuda desesperadamente porque viven en un limbo legal semejante a una pesadilla". "Esto provoca que sean uno de los grupos más excluidos del mundo. Aparte de la miseria causada a estas personas, el efecto que tiene marginar a grupos enteros durante generaciones provoca un gran estrés en las sociedades que forman y a veces eso es motivo de conflictos", ha explicado.
ACNUR comenta que "hay muchas causas que provocan que haya apátridas" y que sus consecuencias "pueden ser dramáticas", como el hecho de que se autoperpetua. "En muchos casos, cuando los padres son apátridas, sus hijos lo son desde el momento en que nacen. Sin una nacionalidad, es extremadamente difícil para los menores de edad tener una educación básica y acceso a otros tipos de servicios", ha explicado.
También recuerda que "técnicamente, los apátridas no son ciudadanos de ningún país y a menudo ven que se les deniegan derechos básicos para tener trabajo, casa, educación y sanidad". Igualmente, denuncia que algunos "afrontan largos periodos de detención porque no pueden probar su procedencia".
"ES VERGONZOSO QUE HAYA MILLONES DE APÁTRIDAS"
Guterres ha tachado de "vergonzoso" que haya millones de apátridas en el mundo y recuerda que tener nacionalidad es un "derecho básico". "El ámbito del problema y sus efectos nefastos sobre las personas pasa casi desapercibido. Tenemos que cambiar esto. Los gobiernos deben actuar para reducir el número de apátridas", ha defendido.
Por otro lado, advierte de que la discriminación a las mujeres "agrava el problema", ya que los estudios de ACNUR revelan que "al menos 30 países mantienen unas leyes que discriminan a las mujeres". De hecho, denuncia que en algunos países este colectivo "corre el riesgo de convertirse en apátridas si se casan con extranjeros"
Finalmente, ACNUR recuerda que el número de países que han ratificado la Convención para reducir los casos de apátridas y la Convención sobre los derechos de los apátridas (1954) "es bajo", ya que en la actualidad "sólo" 61 países han ratificado la primera, que establece los principios y el marco legal para ayudar a que los Estados eviten la apatridia, y 64 países han ratificado la segunda, que define qué personas son consideradas apátridas y establece un mínimo de normas de tratamiento.