BEIJING 14 Sep. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -
La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha acusado hoy a China de continuar obstruyendo el trabajo de los periodistas extranjeros establecidos, llegando a detener o reprender a una treintena de redactores, a pesar de las promesas realizadas por el país para hacerse con los Juegos Olímpicos y las normas introducidas en enero con el supuesto fin de facilitar su labor.
RSF denuncia la reciente detención, el pasado miércoles, de dos periodistas de la agencia France Press, así como el acoso a los redactores de la cadena BBC hace también escasos días.
"No son metidas de pata desafortunadas. Son el resultado de una clara falta de voluntad por parte de la Policía, que se niega a dejar que los periodistas viajen e investiguen libremente. Exigimos al Comité Olímpico Internacional que actúe junto con las autoridades chinas para garantizar que se respetan finalmente las normas introducidas en enero", señala la organización en un comunicado.
Tanto los reporteros de AFP como los del servicio internacional de BBC fueron detenidos cuando intentaban desplazarse a Shengyou, un pueblo al sur de Beijing donde fallecieron hace dos años seis personas y resultaron heridas otras 50 tras una disputa por tierras resuelta por el gobierno local enviando a varios matones.
Según señalaron los periodistas, en los interrogatorios la Policía local intentó obtener los nombres de las personas a quienes pretendían entrevistar.
Anteriormente, otros siete periodistas extranjeros se encontraron con las trabas de la Policía cuando intentaban entrevistar en Beijing a la esposa del abogado encarcelado Chen Guangcheng, a finales del mes pasado. Y los guardias de seguridad de un tribunal de Yixing, en la provincia de Jiangsu (este) impidieron la entrada de reporteros del 'New York Times' y 'South China Morning Post' al juicio contra el medioambientalista Wu Lihong el 10 de agosto.
La encuesta interna elaborada este verano por el Club de Corresponsales Extranjeros de China mostró que el 67% de los participantes consideraban que el país asiático ha incumplido su promesa de aumentar en el país la libertad informativa. El 40% declararon haber sufrido algún tipo de presión desde enero de este año.