MADRID 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha anunciado que redoblará sus operaciones en Filipinas, tras el paso del tifón 'Pablo', que ha dejado más de 900 muertos, y ha lanzado un llamamiento para recaudar 10,8 millones de dólares (8 millones de euros) estos nuevos planes.
El balance de víctimas por el paso del tifón 'Pablo' --conocido internacionalmente como 'Bopha'-- por el sur de Filipinas se sitúa actualmente en los 902 muertos y 635 desaparecidos. La mayoría de los fallecidos se encuentran en las provincias de Davao Oriental, con 404 muertos, y de Valle de Compostela, con 440, ubicadas ambas en el sur de la isla de Mindanao.
'Pablo' aterrizó hace una semana en la ciudad de Baganga, ubicada en Davao Oriental, con vientos sostenidos de 175 kilómetros por hora y ráfagas de 210 kilómetros por hora. Se espera que se debilite a medida que recorra el territorio filipino.
El jefe de las actividades operacionales del CICR en Asia oriental, Alain Aeschlimann, ha explicado que "en la costa oriental de Mindanao el tifón ha dejado tras de sí daños ingentes". "La población se ha quedado prácticamente sin nada. Además de perder sus viviendas están preocupados por lo que les depara el futuro, ya que los cultivos de los que dependen para su subsistencia han quedado en su mayoría arrasados", ha denunciado.
"Nuestra prioridad consiste en proporcionar a la población ayuda de urgencia con el objetivo a largo plazo de ayudarles a restablecer la normalidad", ha manifestado Aeschlimann. "La mayoría de los fondos que solicitamos se destinarán a alimentos y materiales para construir refugios, que se pueden entregar inmediatamente", ha asegurado.
Ante los daños sufridos en las redes de abastecimiento de agua, la CICR está transportando agua potable a los lugares más afectados. Además, el Comité está colaborando en el suministro de centros médicos y en su reconstrucción.