MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
Misiones Salesianas ha hecho un llamamiento a los gobiernos de todos los países y organismos internacionales que se empleen en proteger a la infancia ante el enrolamiento al que han sido sometidos por parte de grupos terroristas alrededor de 300.000 niños en todo el mundo, según la congregación.
Aún así, advierte de que la cifra de menores que corren esta suerte "es difícil de calcular", pese a que estima que el total "no disminuye en tanto que los conflictos en el mundo tampoco lo hacen".
De acuerdo con los datos que maneja la congregación, en República Centroafricana podría haber hasta 10.000 niños "usados" en la guerra por las milicias Seleka y Antibalaka, a los que habría que añadir los menores que sufren la misma suerte a manos de Boko Haram, en Nigeria, y en Irak y Siria por parte de Daesh (Estado Islámico), en Colombia por las FARC y en otros territorios en conflicto como Mali o Yemen.
En el caso de Boko Haram y Daesh, los niños son "secuestrados" para ser empleados, o bien como guerrileros, o bien como "escudos humano, como esclavos sexuales o para cometer explosiones suicidas".
Según la portavoz de Misiones Salesiana, Ana Muñoz, los secuestros y enrolamientos forzosos por parte de grupos terroristas, son "una nueva amenaza para los niños, niñas y jóvenes en países como Nigeria, Yemen o Siria".
La organización trabaja en países como Sierra Leona, República Democrática del Congo o Colombia para tratar de garantizar que los menores que sufren esta suerte "tengan una segunda oportunidad" de formarse y recibir educación, una vez rescatados.
"Las consecuencias de la violencia vivida para el desarrollo de estos niños son muy graves y hay que trabajar con ellos de una manera integral y dar alternativas a esa conducta violenta aprendida. Su reinserción es difícil, pero no imposible como nos demuestran miles de casos de niños y niñas en los proyectos salesianos", ha explicado Muñoz.
