Actualizado 26/11/2009 13:09

Aborto.- Bono dice que el aborto no es un derecho ni un bien pero es una realidad que debe ser regulada


MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, señaló hoy que el "aborto no es un bien ni un derecho" pero sí es "una realidad", y la experiencia dice que "su prohibición en cualquier circunstancia, además de acarrear graves e indeseadas consecuencias, sólo ha logrado su práctica clandestina".

Ante esta realidad, explicó en un artículo publicado hoy en El País, bajo el título 'Aborto: ni derecho ni obligación', que "el legislador responsable no debe mirar a otro lado". Por eso, defiendió la nueva ley que, a su juicio, reducirá el número de interrupciones de embarazo.

Bono, citando al profesor Peces-Barba, recuerda que "los derechos se basan y buscan bienes, nunca males" y que "el aborto es siempre un mal porque acaba con un germen de vida y se rompe una línea biológica natural". Pero la ley lo regula porque "ponderando los bienes y los males en juego, considera que puede haber otros males mayores".

El presidente del Congreso recalcó que el texto que reforma la actual legislación del aborto no lo recoge como un derecho y aseguró con certeza "que el feto no es un órgano propio de la mujer, sino una realidad distinta de la mujer gestante". "El feto es más un 'alguien' que un 'algo'" apostilló y añadió que no puede negar sin mentirse que tiene la convicción de que "en el seno materno se alberga una vida humana en formación que es digna de protección".

EL FETO ES UN BIEN PROTEGIDO

Bono recordó que el Tribunal Constitucional establece que el feto "es un bien no sólo constitucionalmente protegido sino que encarna un valor central del ordenamiento constitucional". Así, resalta que la actual ley "ha dado cobertura, por su ambigüedad, a un excesivo número de abortos: 115.812, sólo en 2008" y a abusos "escandalosos", como "la falta de limitación temporal del supuesto de la salud psíquica, bajo el cual se ha producido el 97 por ciento de los abortos",.

Ésto es lo que ha llevado a que el Consejo de Estado diga que "España un paraíso del turismo abortista". Esta realidad, agregó, invita a defender el nuevo proyecto, "aunque sólo sea por la teoría del mal menor".

Por otro lado, indicó que en el núcleo de sus convicciones éticas y religiosas "está la defensa de la vida y el amparo al más débil, valores que son patrimonio de la tradición humanista y progresista española", y señaló que "en este tema, como dice Obama", se ha de evitar "la caricatura del otro", porque "el aborto no debe presentarse como un asunto ideológico sino de conciencia".

"LEY PARA LA REDUCCIÓN DE ABORTOS"

El nuevo proyecto de ley, "que bien podría denominarse Ley para la Reducción de Abortos en España", "debe servir para reducir el número de embarazos no deseados que conducen al aborto y también para garantizar mejor la protección del nasciturus y para mejorar las garantías jurídicas para las mujeres que deciden interrumpir su embarazo".

Además, Bono dice que la Iglesia católica acepta que "un parlamentario pueda lícitamente ofrecer su apoyo a propuestas encaminadas a limitar los daños de esa ley (aborto) y disminuir así los efectos negativos..." (Encíclica Evangelium Vitae, n. 73), palabras que a su juicio "resultan contradictorias, además de socialmente chocantes, con las posiciones condenatorias y de agresividad actual de aquellos religiosos españoles que, durante los ocho años que gobernó el PP, aceptaron mansamente la aplicación de la ley de aborto aprobada en 1985".

En este sentido, insistió en que "hay sectores de la Iglesia católica que exigen al Estado que actúe con mano justiciera, aplicando penas y castigos, mientras se reservan para ellos la mano acogedora del perdón o de la penitencia purificadora". "Como político que quiere inspirar su vida en el Evangelio de Jesús, aspiro a que también la nueva ley incluya una dimensión de comprensión y de misericordia", añadió.

Por último, aseguró que "el proyecto de ley es, sin duda, mejorable". Por ello, los diputados van a debatir el proyecto y "puede salir mejorado", de manera que la nueva ley "no se vea como una propuesta partidista".