MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
La plataforma de disidentes cubanos Cuba Democracia ¡Ya! responsabilizó hoy miércoles a las autoridades cubanas del "asesinato" del preso político Orlando Zapata, en huelga de hambre desde hace 85 días, y criticó la actitud del Gobierno español respecto al régimen de la isla. Así lo manifestó el presidente de esta organización, Rigoberto Carceller, en una concentración celebrada frente a la Embajada de Cuba en Madrid, a la que acudieron apenas una veintena de personas.
"Fueron los carceleros los primeros que indujeron este asesinato negándole durante 18 días que pudiera beber agua", dijo Carceller, que añadió que dichos carceleros son "cómplices" y "responsables de esta muerte".
Carceller también comentó que las autoridades cubanas "ya sabían que esto iba a suceder", y recordó que al popular opositor Jorge Luis García Pérez, conocido como Antúnez, "lo tienen detenido desde hace varios días". "Han amenazado a varios disidentes hace unos cuantos días" para "que no fueran a participar en el funeral", añadió, al tiempo que señaló que las fuerzas del orden cubanas "tienen tomada" la localidad de Banes, de donde era originario Zapata.
ESPAÑA DEBERÍA "TOMAR NOTA"
En su opinión, las autoridades españolas "deberían tomar nota" de este suceso. "El Gobierno de España se está haciendo demasiado sordo. No quiere escuchar nada, ni siquiera quiere ver ahora mismo un cadáver que tiene en la punta de su nariz", manifestó.
Durante la concentración de hoy, que había sido convocada por la misma organización, la Policía Nacional impidió que Carceller y otros disidentes depositaran un ramo de flores ante las puertas de la Embajada.
Los mismos activistas arrojaron entonces las flores desde la acera de enfrente, y Carceller intentó, de nuevo sin éxito, introducir en la legación la banda con el nombre del fallecido. En todo momento los manifestantes fueron increpados por un pequeño grupo de partidarios del régimen castrista que se había concentrado en la acera de enfrente.
El líder de Cuba Democracia ¡Ya! aseguró que los disidentes están pagando "con precio de vida la libertad". "No vamos a dejar que esta muerte caiga en el olvido", dijo. "Queremos evitar una confrontación civil, que después no digan que somos nosotros los cubanos, los demócratas cubanos, los que no queremos sentarnos a conversar, que somos intolerantes, que somos incapaces de dialogar", agregó. Por último, anunció que se están organizando más actos en señal de protesta para los próximos días.
