MADRID 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
La adjunta primera al Defensor del Pueblo, María Luisa Cava de Llano, mostró hoy su "preocupación" por los casos de menores, muchos de ellos con nacionalidad española que intentan entrar en España con un progenitor que no tiene nacionalidad española, que se encuentran con "pegas" en la frontera para acceder a este país.
Cava de Llano hizo estas declaraciones en el Congreso de los Diputados tras las preguntas de los medios sobre el caso del niño dominicano de 3 años de edad que ayer fue inadmitido en el Puesto Fronterizo de Barajas por carecer de visado y cuya repatriación fue suspendida por un juez.
Sobre estos casos, dijo que la posición del Defensor del Pueblo es "primar el interés del menor". En líneas generales, consideró que no hay "una voluntad de expulsar a muchos menores, aunque tampoco hay una voluntad muy clara de admitirlos con los brazos abiertos" y agregó que la policía se limita a "cumplir con su obligación y con las directrices que se dan desde instancias superiores".
En cuanto al caso del niño dominicano, la número dos del Defensor del Pueblo señaló que el juez tomó la decisión correcta pese a que el menor no tenía el visado y no está situación regular, al igual que su padre, que en su día tuvo un permiso de residencia pero que no se le renovó porque tuvo un "pequeño problema penal". De este modo, la institución, que intermedió en el asunto, celebró que el menor no haya sido repatriado.