NUEVA YORK 5 Ago. (Reuters/EP) -
Un equipo de Naciones Unidas viajará en las próximas semanas a Birmania para presionar al Gobierno y a los grupos rebeldes y que dejen de alistar a niños como soldados, una práctica habitual y que origina condenas continuas por parte de la comunidad internacional, en general, y de la ONU, en particular.
La representante especial de la organización para la defensa de la infancia en conflictos armados, Radhika Coomaraswamy, denunció que, aunque la Junta Militar birmana ha realizado avances, aún no existe certeza de la "extensión" de las iniciativas adoptadas. Por este motivo, un equipo de la ONU viajará al país asiático "a finales de mes".
Coomaraswamy indicó que la intención de la misión consiste en hacer ver a las fuerzas birmanas la necesidad de implantar los planes de la ONU en sus ejércitos y milicias. Por otra parte, Naciones Unidas mantiene su petición de democratización en Birmania, donde reclama la liberación de todos los presos políticos.