Actualizado 29/04/2010 15:35

La Junta de CyL fija los objetivos de cooperación hasta 2012 y destinará el 0,36 por ciento de sus ingresos

VALLADOLID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León aprobó hoy el nuevo Plan Director de Cooperación al Desarrollo 2009-2012, elaborado con consenso, y a través del cual el Gobierno regional destinará el 0,36 por ciento de sus ingresos a cooperación.

Este Plan contribuirá a la erradicación de la pobreza, a hacer realidad los derechos humanos y a impulsar cambios en los países desfavorecidos que mejoren el bienestar de las personas.

El Plan Director de Cooperación establece una serie de prioridades por países, áreas y objetivos para aumentar la eficacia y mejorar los resultados de las políticas de ayuda al desarrollo y de los proyectos que se financian.

Entre las prioridades por países, se encuentran la reserva del 25 por ciento de la ayuda al desarrollo a los 22 países más pobres del África Subsahariana; entre las prioridades por áreas la reserva del 20 por ciento proyectos de servicios básicos colectivos, como son el acceso al agua potable y el saneamiento, la educación, la vivienda digna, la habitabilidad básica y la salud.

En cuanto a las prioridades por objetivos, se encuentran, entre otros, la lucha contra la pobreza y sus causa, la defensa de los derechos humanos y la defensa de la igualdad de género.

Para la elaboración del Plan Director, la Consejería de Interior y Justicia apostó por el consenso y realizó entrevistas, encuestas y consultas a más de 150 organizaciones, explicó el documento en las Cortes de Castilla y León para recibir las aportaciones de los Grupos Parlamentarios y, con el texto definitivo, recibió la aprobación del Consejo de Cooperación al Desarrollo de Castilla y León.

PRIORIDADES GEOGRÁFICAS

El Plan establece unas prioridades geográficas, que marcan las zonas de actuación, unas prioridades sectoriales, que señalan las áreas fundamentales sobre las que se trabajará, y unas prioridades horizontales, que identifican los objetivos generales.

En lo referente a las prioridades geográficas, el Plan apuesta por los países con menor Índice de Desarrollo Humano, por los que tienen en su interior grandes diferencias de desarrollo y, por último, por los países empobrecidos que tienen relación histórica, cultural o social con Castilla y León.

Entre los países del primer grupo se encuentran los 22 países del África subsahariana más pobres, para los que se reservará el 25 por ciento de la ayuda, los países de guerras recientes, los países con desplazados y refugiados, los afectados por pandemias como Sida, malaria, tuberculosis y cólera y los que padecen hambrunas o graves crisis alimentarias.

El segundo grupo incluye países con grandes diferencias de desarrollo en el interior de su territorio debido a que persisten extensas capas de su sociedad especialmente desfavorecidas o desestructuradas.

En lo referente al tercer grupo, recoge países con los que Castilla y León guarda relaciones históricas, sociales y culturales, así como una vinculación especial debido a los procesos migratorios.

En cuanto a las prioridades sectoriales, destacan, los proyectos dirigidos a servicios colectivos de carácter básico para los que se reserva el 20 por ciento de la ayuda al desarrollo. Entre ellos se encuentran el acceso al agua potable, las redes de saneamiento y abastecimiento, la educación básica, el acceso a vivienda digna, la habitabilidad básica y la salud, incluida la lucha contra las grandes pandemias, como el Sida.

Otras de las prioridades sectoriales son la seguridad alimentaria, la dotación y mejora de infraestructuras, la prevención de conflictos y la promoción de la paz, la formación, el desarrollo del tejido empresarial y la promoción de la cultura y el patrimonio. Estas medidas cumplen el compromiso adoptado por los principales partidos políticos en el Pacto de Estado contra la Pobreza de 2007.

AUTOSUFICIENCIA ALIMENTARIA

También se puede resaltar la apuesta por la soberanía y la autosuficiencia alimentaria y por los proyectos de codesarrollo que promuevan asociaciones de inmigrantes que se encuentran en Castilla*León para trabajar a favor del desarrollo de sus países de origen.

Por último, entre las prioridades horizontales se encuentran la igualdad de género, la lucha contra la pobreza y sus causas, la sostenibilidad medioambiental, la defensa de los Derechos Humanos, como garantía e impulso de la democracia, y el respeto a la diversidad cultural, con una especial atención a la participación de las poblaciones indígenas en las intervenciones de cooperación al desarrollo.

Por otro lado, el Plan establece las distintas vías de cooperación que de forma anual establecerá la Junta de Castilla y León. Por un lado, puede ser cooperación económica mediante el apoyo a proyectos de desarrollo presentados por organizaciones no gubernamentales o fundaciones, la financiación de organismos internacionales, la ayuda de emergencia en crisis humanitarias por catástrofes naturales o conflictos, los programas de comercio justo con apoyo a la producción y a la distribución de productos locales de las zonas más desfavorecidas, y por otro, iniciativas de formación e investigación y apoyo técnico.

Este Plan Director es un desarrollo de la Ley de Cooperación al Desarrollo y en la actualidad, la Consejería de Interior y Justicia desarrolla cada año más de un centenar de proyectos de cooperación en distintas líneas y programas.