A BORDO DEL 'INS KIDON' (MAR MEDITERRÁNEO), 31 May. (Reuters/EP) -
Un soldado israelí que participó este lunes en la operación contra la flotilla solidaria que llevaba ayuda a la Franja de Gaza y que se ha saldado con la muerte de al menos diez activistas aseguró que a algunos de sus compañeros les quitaron sus cascos y su equipamiento y a otros les lanzaron de una cubierta a otra situada más abajo y tuvieron que tirarse al mar para salvar la vida.
Un camarógrafo de la agencia Reuters que iba a bordo del barco de la Marina israelí 'Kidon' afirmó que los comandantes israelíes que supervisaron la operación contra el convoy, formado por seis barcos, se quedaron sorprendidos por la gran resistencia que opusieron los activistas pro palestinos.
Los militares israelíes indicaron que quienes iban a bordo del barco turco 'Mavi Marmara' les atacaron con cuchillos y palos. "Me golpearon con palos y botellas y me robaron mi fusil", dijo uno de ellos, que añadió que sacó su pistola y no le quedó "otra opción" más que "disparar".
Según las autoridades israelíes, los soldados dispararon en defensa propia y en el enfrentamiento murieron diez activistas y resultaron heridos varios militares. Un portavoz del Ejército señaló que algunos soldados llevaban pistolas de 'paintball' pero que estas armas no servían frente a los activistas. "Llevaban pistolas con munición real por si acaso, para defenderse", agregó.
Uno de los militares contó a los medios de comunicación que al descender desde un helicóptero por una cuerda a uno de los seis barcos, fue atacado inmediatamente por un grupo de personas que le estaban esperando. "Nos agredieron con barras de metal y cuchillos", aseveró. "En algún momento también dispararon contra nosotros con munición real", declaró.
