Actualizado 01/07/2014 14:00

Policías forales y municipales de Pamplona controlarán posibles agresiones sexistas en el chupinazo de San Fermín

Junta de Seguridad de San Fermín.
EUROPA PRESS

Un total de 2.350 agentes integran el dispositivo de seguridad para las próximas fiestas

PAMPLONA, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

El chupinazo de San Fermín de este año contará con un nuevo dispositivo de seguridad formado por policías forales y municipales de Pamplona que se dedicarán a vigilar y detectar posibles agresiones sexistas en el inicio de la fiesta.

Así lo han explicado este martes en rueda de prensa el consejero de Presidencia, Justicia e Interior del Gobierno de Navarra, Javier Morrás, el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, y la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, quienes han comparecido ante los medios de comunicación después de la Junta de Seguridad de San Fermín.

Un total de 2.350 agentes integrarán el dispositivo de seguridad para las próximas fiestas, 900 policías nacionales, 300 guardias civiles, 400 policías municipales, y 750 policías forales.

Entre las nuevas actuaciones que se contemplan este año, Morrás ha explicado que se pondrá en marcha un dispositivo conjunto de Policía Foral y Policía Municipal para "evitar agresiones sexistas, especialmente durante el chupinazo".

En concreto, ha indicado que "patrullas de Policía Foral y Municipal estarán ubicadas en balcones de la plaza Consistorial para controlar la posible existencia de cualquier agresión sexista e identificar a los autores".

El consejero ha apuntado que "a nadie se le escapa la dificultad de actuar dentro de la plaza en el chupinazo", pero ha añadido que "si fuese necesario se podría identificar incluso con imagen a quienes hayan podido cometer una agresión y posteriormente proceder a su identificación y denuncia o detención, en función de la gravedad de los hechos".

En este sentido, Morrás ha realizado un llamamiento a la ciudadanía para que "actuaciones como las que hemos podido ver en años anteriores no sean jaleadas, sino todo lo contrario, que sean rechazadas". "Tiene que haber un compromiso ético por unas fiestas en libertad para todos", ha añadido.

Otra de las novedades en el trabajo de la Policía Foral en San Fermín, según el consejero, es la puesta en marcha de un dispositivo para "tratar de erradicar la violencia gratuita que se puede producir en la suelta de vaquillas después del encierro en la plaza de toros, porque en ocasiones podemos comprobar que actos que pueden ir en contra del reglamento taurino suelen acabar con la justicia por su mano".

En esos casos, ha defendido el consejero, "se debe proceder a la identificación de los autores de esas malas praxis, de esas situaciones de riesgo, y proceder a la correspondiente denuncia administrativo con la sanción en su caso".

Además, Morrás ha destacado que Policía Foral trabajará por "perseguir con el máximo rigor la venta ambulante, porque supone una competencia desleal hacia pequeños empresarios, una economía sumergida, y porque en el caso de productos alimentarios puede suponer riesgo sanitario".

NUEVA ORDENANZA DEL ENCIERRO

Por su parte, Enrique Maya ha remarcado que este año entra en vigor la nueva ordenanza de San Fermín y ha recordado que la barrera policial que se establecía en el arranque de la cuesta de Santo Domingo para garantizar una distancia mínima entre corredores y reses pasa de mantener una barrera física de contención con agentes hasta iniciado el encierro a ser señalizada en el suelo.

En cuanto al nuevo dispositivo contra las agresiones sexistas en el chupinazo, ha valorado que "es una medida que va a ser positiva". "Nos preocupa cualquier agresión, por supuesto la agresión sexista, y también el uso que se ha hecho en los años pasados, sobre todo en el chupinazo, de este tema para lanzar esa imagen realmente negativa de la ciudad", ha afirmado Maya.

Por otro lado, ha asegurado que la zona de aparcamiento naranja fue "un evidente éxito" en 2013, ya que "funcionó muy bien". Este año se va a ver incrementado esta zona con el espacio de hospitales, ha destacado el alcalde, que ha informado de que en los pasados Sanfermines hubo 165.286 usuarios de esa zona naranja, que sirvió para tranquilizar el tráfico en el centro de la ciudad".

AUMENTAR LA COORDINACIÓN

Por su parte, Carmen Alba ha recordado que la Junta de Seguridad de San Fermín busca "aumentar más si cabe la coordinación entre los diferentes Cuerpos y Fuerzas de Seguridad" con el fin de "conseguir que los Sanfermines vayan lo más tranquilos posible".

La delegada del Gobierno en Navarra ha advertido que durante estas fiestas se generan "momentos de mucha aglomeración", por lo que Policía Nacional y Guardia Civil trabajará, entre otros aspectos, en "prevenir delitos y conseguir su resolución".

Asimismo, Carmen Alba ha informado de que los agentes llevarán a cabo controles de velocidad, alcohol y drogas en las entradas y salidas de Pamplona.

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