NUEVA YORK 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) presentó ayer las bases de su plan estratégico para cuatro años --en fase final de redacción-- con la intención de mejorar notablemente su gestión y transparencia, consciente de que en ocasiones la agencia de la ONU ha sido acusada de opacidad.
El administrador asociado del programa, Ad Melkert, indicó en rueda de prensa que el PNUD "debe rendir cuentas a las poblaciones a las que asiste, así como a los países que lo financian con sus impuestos".
Para ello, apuntó que es necesario encontrar un equilibrio entre la descentralización de su organización --lo que permite una respuesta rápida y flexible a las exigencias locales-- y la necesidad de supervisar las actividades y la utilización de los fondos en los países.
En este sentido, Melkert celebró el trabajo "silenciosamente eficaz" del PNUD, "en las regiones más atrasadas y las más faltas de infraestructuras del mundo" y "lejos de las cámaras".
En relación a sus últimos viajes al sur de Sudán y a República Democrática del Congo, Melkert reconoció que "es posible trabajar mejor, a pesar del contexto cada vez más peligroso y difícil".
Así, repasó los tres elementos básicos del nuevo plan estratégico de la agencia de Naciones Unidas: la mejora de la coordinación del PNUD con las otras agencias de la ONU, el acento sobre los grandes ejes de la actividad del programa --desarrollo, prevención de conflictos y reconstrucción-- y, sobre todo, la mejora de la gestión y de la transparencia del PNUD.
Respecto a este último punto, Melkert señaló que se había establecido el pasado año un comité consultivo independiente para las auditorías, a cuyo informe deben tener acceso tanto los miembros del consejo de administración del programa como los Estados miembros.