Actualizado 21/05/2007 15:16

RSC.- La agencia de rating en sostenibilidad Oekom relaciona los niveles de obesidad con la composición de los alimentos

Un Informe demanda a las empresas un "mayor" esfuerzo para alcanzar niveles "ecológicos y socialmente aceptables" en los productos


MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -

La agencia alemana de rating en sostenibilidad 'Oekom' publicó recientemente un estudio que evalúa la responsabilidad social de 29 empresas mundiales pertenecientes al sector de la alimentación, y que concluye que la mayoría de los alimentos contienen "demasiada azúcar, sal y grasas", lo que eleva los índices de obesidad de la población.

El estudio analiza el comportamiento 'responsable' de las empresas, basándose en diferentes aspectos ambientales y sociales, para lo que establecía una clasificación: desde el + (para las compañías más responsables) hasta la 'd' (para las menos responsables). Unilever y Danone, por citar algunos ejemplos, obtuvieron una 'b', por lo que se colocaron en la mitad de la tabla.

El Informe indica que, aunque los consumidores son los primeros responsables de lo que compran, las empresas del sector también juegan un papel importante por lo que muchas de ellas están llevando a cabo estrategias específicas con compromisos concretos.

En este sentido, una de las responsables del estudio, Isabelle Reinery, reveló que "las principales empresas del sector están repasando y formulando de nuevo la composición de sus productos". La experta citó los casos de Unilever, "que acaba de hacer una reducción significativa de sal y azúcar en algunos de sus productos" y de Danone, "que también usará menos azúcar en el futuro, principalmente en sus productos de yogur".

Además de alertar sobre la composición de los productos, el Informe también denuncia que muchas compañías dan una información inadecuada sobre los riesgos alimentarios al tiempo que incurren en una publicidad 'engañosa', estrategias que repercuten negativamente sobre los menores, según Reinery. Por este motivo, multinacionales como Coca-Cola emiten sus 'spots' para segmentos concretos de población, en función de su edad.

El estudio también hace hincapié en el tratamiento de las materias primas por parte de las multinacionales, alertando sobre el empleo intensivo de los pesticidas, los métodos de crianza que se desarrollan en las granjas de animales o la explotación de los mares.

"IR MÁS ALLA"

De cualquier modo, el estudio constata que la mayor parte de empresas informa adecuadamente sobre los valores nutritivos de sus productos y destaca el caso del fabricante de confitería Cadbury Schweppes, que recomienda en sus etiquetas consumir sus productos 'con moderación'.

Asimismo, recuerda que muchas multinacionales están ampliando sus gamas con productos más sanos, siguiendo "líneas sostenibles y responsables". Este es el caso de Unilever, que gradualmente está implantando formas sostenibles en los métodos de agricultura y pesca. La multinacional también colabora con la organización ecologista WWF para promover la creación de etiquetas que reconozcan la pesca sostenible. Otras compañías incluyen en sus productos etiquetas que garantizan prácticas responsables, como el comercio justo.

En opinión de Reinery, "aunque vamos en la dirección correcta, tenemos que ir más allá". "Las empresas tienen que ser constantes para mejorar la calidad de sus productos y facilitar al consumidor información útil y eficaz", señaló.

Así, el Informe insiste en que hay que realizar un esfuerzo "mucho mayor" para alcanzar un nivel "ecológico y socialmente aceptable" de los productos.