SORIA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente del Instituto de Empresa y ex rector de la Universidad Complutense de Madrid, (UCM), Rafael Puyol, apuntó a las políticas de conciliación de la vida laboral y personal como posible solución a la mejora de la natalidad en España, de las más bajas de la Unión Europea.
Como demógrafo y experto consideró la incompatibilidades entre lo personal y lo laboral como una de las trabas a la decisión de tener más hijos de los trabajadores y especialmente de las trabajadoras, por lo que abogó por políticas de ayuda familiar, como ocurre en Francia y en los países Escandinavos, donde tienen los índices de natalidad más altos.
Durante la ponencia 'Una mirada al futuro de la población hoy', que cerró este lunes las intervenciones del Foro Soria 21 sobre Población y Desarrollo Sostenible --que se clausurará hoy-- Pujol mostró sus dudas sobre '¿qué va a ser de nosotros en el futuro?' en relación a las hipótesis del futuro cambio poblacional de la España del 2025.
"En la actualidad nos encontramos con un desequilibrio en la distribución demográfica, en un país en el que la industrialización se ve envejecida y se produce una desnatalidad y en el que las inmigraciones son tan elevadas para paliar los desequilibrios y mantener activa la economía", explicó.
A su juicio, las condiciones de población "no pueden fijarse", porque se producen errores. Así, los demógrafos, actúan como "hombres del tiempo" por lo que hacen previsiones y no predicciones que se van ajustando a una realidad cambiante.
El Instituto de Empresa realizó en 2000 un estudio en el que se establecían unos cálculos para ver como evolucionaba la mortalidad, la natalidad y el balance de emigrantes que vienen y tras un tiempo regresa a sus países.
Entre los cálculos que se manejan cabe destacar en primer lugar que España fue el país con mayor esperanza de vida --77 años en los hombres y 84 en la mujer--, una esperanza de vida va a seguir creciendo hasta, al menos, el 2025 --86 en mujeres y 80 en hombres-- pero como contrapartida aumentará también el número de defunciones.
En segundo lugar, y en cuanto al futuro de la fecundidad, destacar la escasez relativa de jóvenes, aunque esto conlleva un acomodo más rápido y una mejor inserción laboral. La natalidad será más precoz que actualmente. "Es preciso que a corto plazo pueda mejorar la natalidad pero también es probable que no se pueda mantener más allá de 2015", dijo. Hasta 2013 se producirá una mejora en la natalidad, según sus datos.
En relación al tema de migraciones, --que Pujol también abordó--, el experto consideró que nos encontramos ante "un futuro incierto". "Hemos pasado de ser de la España peregrina a un país de destino en lo universal", dijo. En España conviven más de 150 nacionalidades diferentes, principalmente ciudadanos procedentes de América Latina.
En este sentido, España va a continuar creciendo en los próximos quince años, un efecto que el IE sostiene que se prolongará hasta el 2050. Los más optimistas afirman que se llegará a unos 50 millones de habitantes, seis millones más que en la actualidad.
En cuanto a la edad, se producirá una disminución de población joven, según Pujol y un retroceso de la población adulta, con un envejecimiento progresivo de la población adulta y la intensificación del envejecimiento.Es decir, "más viejos, cada vez más viejos". A su juicio, la idea de que el aumento de personas mayores podría suponer más un problema que un privilegio, "no tendría que ser así"; sino que debería considerarse "una conquista social y una victoria a la muerte".
