Actualizado 04/06/2009 15:06

Las ventas de productos de Comercio Justo certificado aumentaron un 40% en España el año pasado

MADRID, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los consumidores españoles gastaron el año pasado 5,4 millones de euros en productos certificados con el 'Sello Fairtrade' --un certificado de calidad que verifica que los productos se comercializan con criterios de comercio justo--, lo que supone un crecimiento del 40 por ciento respecto a 2007.

En rueda de prensa celebrada en Madrid, el director del Sello Fairtrade-Comercio Justo en España, Pablo Cabrera, destacó que, "a pesar de la crisis, los consumidores españoles apuestan por este tipo de productos, pues se consumen habitualmente, benefician a los productores y tienen un factor añadido de calidad". En España, hay 31 empresas que tienen productos propios certificados con este sello.

A nivel internacional, las ventas de productos de Comercio Justo también han experimentado un aumento del 22 por ciento en comparación con 2007, con 2.894 millones de euros facturados en todo el mundo.

Por países, Reino Unido (con 880 millones de euros de ventas), Estados Unidos (con 757 millones), Francia (con 255 millones) y Alemania (con 212 millones) lideran la clasificación mundial. España se encuentra en las últimas posiciones "porque estos productos empezaron a comercializarse en el 2005, cuando en el resto de países llevan vendiéndose desde hace 10 años", precisó Cabrera.

Por productos, destaca el nivel de ventas del té, que crecieron un 112 por ciento en el último año. Los productores de algodón también han duplicado sus ventas, ya que en 2008 vendieron más de 27 millones de prendas, desde camisetas y vaqueros hasta toallas.

En el caso del café, uno de los productos más emblemáticos, el aumento fue del 14 por ciento, aunque Cabrera pronosticó que, de cara a 2009, el incremento "será aún mayor" después de que la compañía Starbucks se haya comprometido a doblar sus compras de café certificadas con el sello de Comercio Justo.

Esta certificación garantiza que un producto procedente de países del Sur se ha producido en condiciones dignas y comprado a un precio justo, que cubre de manera estable los gastos de producción. Además, deja un margen para la inversión en proyectos de la comunidad de los productores, como puede ser la construcción de escuelas y hospitales o de centros de formación profesional.

Actualmente es posible certificar productos como el café, el cacao, el azúcar, el té, la miel, las flores, el arroz, balones de deporte, especies, algodón, fruta fresca, frutos secos, bananas, vino o zumos de fruta.