EUROPA PRESS/CONSEJERÍA DE SALUD
SEVILLA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Salud, Marina Álvarez, ha agradecido y reconocido este miércoles públicamente en el Parlamento de Andalucía el "impecable" trabajo del equipo de profesionales del Hospital Virgen de las Nieves de Granada que ha hecho posible un nuevo hito en la sanidad pública andaluza, al tratarse de segundo caso registrado en España de ablación cardiaca en un bebé de menos de tres kilos y con apenas dos semanas de vida.
En palabras de la titular de Salud, son muchos los profesionales que han intervenido y han sido clave para hablar hoy de este nuevo éxito y que "cada día demuestran su excelencia y su compromiso con la sanidad pública".
Según ha recordado Álvarez en respuesta a una pregunta formulada por el Grupo Socialista, el Hospital Virgen de las Nieves es un centro de referencia para la medicina materno-fetal y arritmias cardiacas pediátricas. Concretamente, en el tratamiento de arritmias cardiacas es uno de los cinco centros con mayor experiencia en España.
Además, señala que de todas las ablaciones eléctricas que se realizan en el país, algo menos del tres por ciento se realiza en pacientes pediátricos, principalmente en menores de entre 7 y 15 años. El año pasado, el equipo que dirige Luis Tercedor realizó 426 ablaciones, de las que 23 fueron en niños. Lo habitual es realizarlas cuando los pacientes superan los 15 kilos de peso, porque son menores las complicaciones que pueden surgir y el procedimiento se realiza con mayor seguridad.
La titular de Salud ha explicado la "excepcionalidad" del caso al que dio respuesta el equipo de Granada, ya que las arritmias incesantes son poco frecuentes y se detectan en uno de cada 5.000 embarazos, aproximadamente. En muchos casos es un problema transitorio que acaba desapareciendo; en otros, si persisten esas taquicardias, se controlan con fármacos que se le dan a la madre durante la gestación.
En muy pocos casos no se puede controlar con estos medicamentos y empieza a correr peligro la vida del feto, con una mortalidad que llega a alcanzar el 35 por ciento de los casos. La ablación con catéter es por tanto el último recurso cuando las otras alternativas han fallado, como ocurrió en el caso del bebé granadino que ahora se encuentra llevando una vida normal y sin la anomalía cardiaca con la que nació.
La intervención, en rasgos generales, consiste en acceder al corazón del niño a través de la vena femoral con un catéter con el que se busca el punto exacto del corazón con la anomalía eléctrica y aquí se administra energía de radiofrecuencia y se quema la zona responsable de producir las taquicardias.
La dificultad en el bebé operado radicaba en su bajo peso y su corta edad, además de la situación crítica en la que se encontraba, haciendo muy complicado el abordaje que debía realizarse en un corazón del tamaño de una nuez y a través de venas de escasos milímetros, según ha subrayado la titular de Salud.