Diputación habilitará, con el proyecto Talaia, un sendero peatonal en la franja costera que una Hondarribia y Mutriku

SAN SEBASTIAN 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Diputación de Gipuzkoa habilitará, a través del proyecto Talaia, una red de senderos peatonales en la franja costera del territorio histórico que pretende unir en un plazo de unos cinco años las localidades de Hondarribia y Mutriku y ofrecer a los ciudadanos un paseo accesible y la contemplación del "importante patrimonio natural" de la costa guipuzcoana.

El diputado para el Desarrollo Rural, Rafael Uribarren, el director de Montes de la Diputación, Asier Arrese, el alcalde de Hondarribia, Aitor Kerejeta, y el director de la Obra Social de Kutxa, Carlos Ruiz, comparecieron hoy en una rueda de prensa en San Sebastián para presentar este proyecto.

La red de senderos, enmarcada dentro del programa de inversiones en infraestructuras de ocio ligado a la naturaleza suscrito por Diputación y Kutxa, se llevará a cabo usando y mejorando algunos caminos ya existentes en la franja costera. Asimismo, habilitará entre un 10 y un 15 por ciento de nuevo trazado.

El proyecto pretende poner en calor la "espectacularidad del relieve costero" en el que destacan espacios naturales protegidos como el Parque natural de Pagoeta, el Biotopo de Iñurritza, la rasa mareal de Zumaia-Deba o los restos culturales y arqueológicos.

El primer tramo de 'Talaia' consiste en habilitar un sendero peatonal que discurra por el monte Jaizkibel, desde el Castillo de San Telmo, junto al puerto de Hondarribia, hasta llegar al final del paseo marítimo existente en Pasaia. El recorrido, de unos 20 kilómetros de longitud, se ha dividido en dos tramos.

El primero de ellos, cuyas obras ya han comenzado, parte de San Telmo hasta Justiz con un sendero de 5 kilómetros más cercano a la costa que la pista actual. El segundo tramo, de 15 kilómetros hasta Pasaia San Juan, discurre más por la parte interior y sus obras de iniciarán a finales del verano.

Este camino está dirigido a un espectro amplio de público, por lo que la Diputación habilitará un recorrido de dificultada baja, evitando pendientes de más del 20 por ciento o pasos de alta dificultad. El proyecto pretende una afección mínima a los recursos naturales y poner en valor la zona del Monte Jaizkibel

Asimismo, se llevará a cabo el desbrozado de la maleza del trazado en un ancho de dos metros, se construirán pequeños muretes secos de contención, se colocará una lámina geotextil y se aportará material drenante y arena tostada, entre otras actuaciones, para lo que apenas se introducirá maquinaria.