Las Juntas Generales de Álava aprueban una moción para estudiar y prevenir la enfermedad de la lengua azul

VITORIA 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

Las Juntas Generales de Álava aprobaron esta mañana, por unanimidad, una moción por la que se estudiará la afección y el coste económico que supone la enfermedad de la lengua azul en el Territorio Histórico.

La moción, que había sido presentada por el grupo popular, fue aprobada por unanimidad por todos los grupos políticos, tras el acuerdo de transacción del texto presentado inicialmente.

La moción contempla realizar un estudio sobre la afección en la cabaña ganadera de la enfermedad de la lengua azul, que se presentará en el plazo de un mes en la comisión de agricultura, y que deberá contener el protocolo habilitado para su control, las medidas adoptadas tanto profilácticas como económicas, el número de animales afectados y muertos, su coste económico con indicación de su raza y la escrutación ganadera durante el año 2008 y el primer semestre de 2009.

Los ganaderos alaveses han padecido los efectos de la lengua azul o fiebre catarral ovina, una enfermedad incluida en la lista A del Código zoosanitario internacional de la Organización Mundial de la Sanidad Animal, cuya propagación supone un grave peligro para la cabaña ganadera.

A pesar de las medidas preventivas tomadas como la vacunación, se han producido varias muertes desde que apareció por primera vez en la provincia, por lo que los ganaderos alaveses han padecido grandes perjuicios económicos.

En un principio, la moción había sido rechazada por el grupo nacionalista al incluir un plan especial de ayudas económicas para los ganaderos afectados, a lo que la procuradora nacionalista, Ana María Ruiz de Alegría, respondió que "ningún presupuesto podría hacer frente a esa financiación" y que ya se había pedido una inversión al Gobierno central.

Desde el grupo jeltzale, apuntaron además que "gracias a la rapidez y la eficacia con la que se ha actuado, este verano no ha aparecido ningún caso en ninguna explotación ganadera alavesa". Ruiz de Alegría explicó que este año se ha trabajado con el objetivo de tener vacunada a la cabaña ganadera antes de verano, la época de mayor incidencia de esta enfermedad, por lo que "las consecuencias no han sido tan graves".