BILBAO, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las Juventudes Socialistas de Euskadi, JSE-Egaz Ramón Rubial, condenó hoy "enérgicamente" los ataques contra la estación del metro de Aiboa y contra un autobús en Markina, así como las pintadas y desperfectos registrados en la Casa del Pueblo de Deusto, y aseguró que sus autores "más pronto que tarde pagarán por lo que han hecho y terminarán donde tienen que hacerlo, que es en la cárcel".
Tras solidarizarse con los ciudadanos afectados, denunció que "se ha atentado contra dos transportes muy utilizados por los ciudadanos, intentando nuevamente sembrar el terror".
"Lamentablemente, en Euskadi hace dos días se acusó al Estado de una nueva conspiración por detener a 34 supuestos miembros de Segi y se les defendió por el mero hecho de ser jóvenes nacionalistas", indicó JSE.
En ese sentido, se preguntó si "piensan también que la culpa la tiene el Estado opresor, o por el contrario saben que tanto los detenidos como los que hoy han atentado y serán puestos a disposición judicial no estaban reconstruyendo ninguna paz, ni estaban ejerciendo su libertad de expresión y reunión, sino que estaban planeando cómo acosarnos más y mejor a los demócratas, cómo conseguir sus fines mediante la violencia, o cómo dar el siguiente paso macabro".
Asimismo, criticó que "el otro día en Euskadi se defendió, desde la irresponsabilidad más absoluta y en base a una supuesta libertad por el mero hecho de ser jóvenes, a 34 individuos que tenían en su posesión las mismas armas y documentos sobre cómo usarlas que las que se han empleado hoy para la quema de un autobús y la explosión de una parada de metro".
"Que nos digan si se creían de verdad que eran inocentes, o lo único que se pretendía era desde la inmoralidad más absoluta, inventarse otro conflicto entre el Estado y el Pueblo Vasco", reclamaron.
La organización juvenil censuró que, "cuando en este país habría que felicitar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y al poder judicial por investigar y prevenir, por defendernos y que vivamos en un país más seguro, tristemente se les pone en tela de juicio, por inventar los continuos y ficticios conflictos entre España y Euskadi, que en nada ayudan a la convivencia, llegando a defender lo indefendible".
