BILBAO, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Patxi López, aseguró hoy en Bilbao que la situación vasca "no es dramática" y que "lo peor de la crisis ha pasado", puesto que los últimos datos del crecimiento económico de Euskadi y la bajada del paro permiten afirmar que se empieza a "ver la luz".
Sin embargo, pidió que "nadie se relaje" y que toda la sociedad vasca apueste por un modelo "basado en la competitividad, en la solidaridad y en la sostenibilidad".
Durante la entrega de los premios de la Empresa Vasca en la capital vizcaína, explicó que hace un año teníamos "un panorama cargado de incertidumbres sobre nuestras cabezas", puesto que estábamos inmersos en una de las crisis "más duras de las últimas décadas, con la recaudación cayendo en picado y con un Presupuesto prácticamente agotado".
Ante esta situación, explicó, el Gobierno vasco tomó medidas "de calado" reordenando los Presupuestos y destinando nuevas partidas a empleo, empresas y ayudas sociales.
"Ha sido un año duro, complicado de gestionar, en el que hemos trabajado en tres direcciones: resistir ante la crisis, ayudando al tejido empresarial; atender a las personas que más estaban sufriendo; y prepararnos para iniciar la recuperación intensificando la competitividad, la internacionalización y la innovación de nuestras empresas y de nuestra economía", aseguró.
A su juicio, aunque actualmente "sigamos navegando por unas aguas complicadas, aunque sigamos amaneciendo con la palabra crisis en las portadas de todos los periódicos, aunque acabemos de adoptar las medidas de recorte y de ahorro más profundas de los últimos años", se debe "subrayar que no todo es oscuridad".
Para López, Euskadi no vive una situación "dramática" y nuestra comunidad está "empezando a ver la luz al final del túnel". "No lo estamos haciendo mal como país", agregó.
Tras repasar los últimos datos macroeconómicos del País Vasco, que posiblemente arrojarán un crecimiento interanual positivo en el segundo trimestre y que muestran una bajada del paro, concluyó que de los mismos se puede deducir que "lo peor de la crisis ha pasado" y que "estamos mejor que hace un año".
"NO RELAJARSE"
"Pero no es tiempo para el relajo, en absoluto. Si una enseñanza debemos de sacar de esta crisis es que estamos ante el fin de un ciclo. Que seguramente hemos estado viviendo por encima de nuestras posibilidades y que hoy nos vemos obligados a tomar medidas que afectan al bienestar actual de la ciudadanía porque es la única manera de garantizar nuestro bienestar futuro", advirtió.
El lehendakari adelantó que la realidad económica de los próximos años estará compuesta por un crecimiento que, en un 70 por ciento, corresponderá a los países emergentes.
A su juicio, para adaptarnos a este nuevo escenario, "debemos hacernos una cirugía completa como país" para afrontar "un cambio profundo en la forma de entendernos a nosotros mismos como sociedad, pero, sobre todo, en la forma de relacionarnos con el mundo".
En este sentido, apostó por un modelo "basado en la competitividad, en la solidaridad y en la sostenibilidad", que debe ser compartido por "todos los agentes" económicos.
"Muchas de las cosas que se están haciendo ahora como la reforma laboral, el saneamiento de las cuentas públicas o la reducción del déficit deben tener un objetivo claro: mejorar nuestra productividad y competitividad como país. Tenemos que salir al mundo a competir y a ganar", concluyó.
PREMIOS
López realizó este discurso en una gala de entrega en el Teatro Campos Eliseos, a la que también acudió el consejero de Economía, Carlos Aguirre, y numerosos representantes del empresariado vasco.
Los galardonados fueron el director de Epsilon-Euskadi, Joan Viladeprat, como 'Euskal Manager'; la empresa de ascensores Orona como 'Premio Innovación'; Peio Guibelalde, del Grupo HINE Renovables, por 'Toda una vida empresarial'; y las Entidades de Trabajo Protegido, EHLABE, que recibieron la 'maquila' del propio lehendakari.