Yolanda Díez, edil de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao, y la directora del Área, Ana Collia, presentan el balance de la OMIC de 2021. - AYUNTAMIENTO DE BILBAO
BILBAO, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
La oficina municipal de información a la persona consumidora, OMIC, de Bilbao gestionó el pasado año 2021 un total de 8.181 consultas, 1.238 reclamaciones y 14 inspecciones de consumo. Además, mantuvo las acciones de formación y educación, llegando a través de ellas a un total de 2.154 alumnos y alumnas de 32 centros escolares.
En el marco de la celebración este martes, 15 de marzo, del Día Mundial de los Derechos de las Personas Consumidoras, la edil de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao, Yolanda Díez, y la directora del área, Ana Collia, han presentado este lunes el balance de actividad de la OMIC durante 2021.
Tal y como ha señalado Díez, "2021, como consecuencia de la continuación del estado de excepcional motivado por la covid-19", la OMIC de Bilbao mantuvo un alto volumen de consultas y reclamaciones motivadas por "la resolución sobrevenida de los contratos en materia de consumo".
Como ejemplo ha puesto el caso de las clínicas dentales Dentix. Según ha explicado, desde mediados de 2020 la OMIC comenzó a recibir y gestionar consultas y reclamaciones derivadas de incumplimiento unilateral de los contratos por parte de las clínicas, en diciembre de 2020 se declaró el concurso de acreedores y en 2021 la OMIC procedió a informar a todas las personas reclamantes sobre las distintas formas de proceder a fin de conseguir "unas respuestas satisfactorias a sus pretensiones". Finalmente, ha destacado, un 80% de las reclamaciones presentadas se archivaron con avenencia.
En 2021, la OMIC gestionó 8.181 consultas, una cifra muy similar a la registrada en 2020, cuando se contabilizaron 8.261 consultas. En ambos casos, son cifras que duplican las recibidas en 2019. Del total de consultas, 1.263 fueron presenciales, 525 se enviaron por correo electrónico y 6.393 fueron telefónicas.
En 2021 los sectores más consultados fueron telecomunicaciones (22%); comercio -textil, calzado- (12%); transporte aéreo (9%); administración pública (9%); gas y electricidad (8%); agencias de viajes (7%); seguros (5%); banca (5%); vehículos motor (4%); muebles, puertas y ventanas (3%); electrodomésticos (2%); educación (2%); arbitraje y conciliación (1%); y alimentación (1%).
En lo referente a las reclamaciones realizadas el pasado año, se recibieron un total de 1.238, una cifra "muy parecida a la que se registró en 2019, pero lejos de las 1.592 registradas en 2020 por motivo del covid-19, ha explicado la edil. Los servicios más demandados fueron telecomunicaciones (28%); transporte aéreo (12%); agencias de viajes (12%); comercio (8%); gas y electricidad (8%); fabricación de productos diversos (4%); mueble, puertas y ventanas (3%); electrodomésticos (3%); alimentos (2%); hoteles y alojamientos (2%); y mantenimiento vehículos motor (1%).
Según ha destacado Díez, las telecomunicaciones vuelven a situarse en primer lugar, "después de que en 2020 fueran desbancadas de esta posición que llevaban años ostentando por las reclamaciones realizadas en el transporte aéreo".
En lo referente a las mediaciones realizadas por el servicio de mediación, la edil ha informado de un estudio de los importes recuperados, que recoge un total de 200.000 euros. Este servicio, ha explicado, se conceptúa como un mecanismo de resolución alternativa de litigios y conflictos extrajudiciales, "destacando su sencillez y gratuidad".
Por otro lado, la OMIC llevó a cabo 14 inspecciones de consumo, nueve de ellas en supermercado, una en la estación intermodal, otra en un centro de estética, otra en un obrador de pastelería y dos en hostelería.
FORMACIÓN Y EDUCACIÓN
La responsable de Salud y Consumo ha precisado que el objetivo de la OMIC no es solo preservar los derechos de las personas consumidoras, sino también "conseguir personas consumidoras críticas y responsables". Para ello, ha insistido, la formación es "la clave" y la formación entre la población escolar "doblemente necesaria e imprescindible, porque haremos alumnos críticos".
En ese sentido, ha destacado que en 2021 se mantuvieron las acciones de formación y educación en la medida que las restricciones sanitarias lo permitieron. En total, a través de diversas actividades, se llegó a 2.154 alumnos y alumnas de 32 centros escolares con diferentes programas.
Según ha detallado, con el programa educativo de consumo responsable, en el que participaron 1.584 alumnos de segundo y tercer ciclo de Educación Primaria y primer ciclo de Educación Secundaria, se visitaron diversos medios de transporte públicos de Bilbao para tratar, entre otros aspectos, la movilidad urbana en relación con el concepto de ciudad sostenible, la contaminación y el ruido, y con el objetivo de potenciar los medios de transporte público como opciones preferentes para los desplazamientos en la Villa.
También se organizaron visitas al Mercado de la Ribera, donde los alumnos "aprenden la importancia de la alimentación sostenible entendida como de calidad, respetuosa con el medio ambiente y producida y distribuida en unas condiciones que contribuyan a potenciar nuestro patrimonio alimentario, alimentos de cercanía y que aseguren el precio adecuado a las personas que los producen", ha explicado.
Asimismo, se realizaron visitas, en este caso virtuales debido a la pandemia, a la estación de tratamiento de agua potable de Sollano, "donde trabajamos para que se comprenda la importancia del agua imprescindible para la vida y se analiza y valora las consecuencias del uso y del abuso de su utilización". Además, se visitó el laboratorio municipal ubicado en el edificio de Harino Panadera, con el fin de "sensibilizar a escolares entre 16 y 18 años en temas de consumo relacionados con la seguridad alimentaria y la comercialización de alimentos".
Con el objetivo de inculcar hábitos de conducta responsable a la hora de consumir y dirigidos a escolares de Bilbao de entre 6 y 12 años, se llevaron a cabo representaciones de títeres en el propio centro escolar con temática de consumo, con la participación de cerca de 500 alumnos.
HITOS
Por otra parte, Yolanda Díez ha destacado que uno de los grandes hitos de 2021 vino el 19 de enero con la aprobación del Real Decreto-ley 1/2021, de protección de los consumidores y usuarios frente a situaciones de vulnerabilidad social y económica. Este Real-Decreto-ley introdujo, entre otros cambios, la modificación del artículo 3 del Texto Refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios (TRLGDCU), que regulaba el concepto de consumidor y que desde entonces define también al consumidor vulnerable, en su apartado segundo.
Otra de las cuestiones a las que hizo frente la OMIC de Bilbao en 2021 fue la entrada en vigor de la nueva factura de la luz diseñada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Para ello se editaron soportes informativos que se distribuyeron a través de la propia oficina de la calle Esperanza, los servicios sociales de base municipales y las asociaciones de mayores de Bilbao.
Además, ha recordado que en el Pleno municipal de 2021 se acordó por unanimidad solicitar a las entidades bancarias de Bilbao que garantizasen el acceso a cuentas de pago básicas a las personas migrantes en situación administrativa irregular y desde la OMIC junto con otras áreas municipales se impulsó una campaña informativa sobre el tema, así como los derechos y obligaciones que ello conllevaba.
Desde 2016 la OMIC de Bilbao cuenta con una Carta de servicios, mediante la cual se da cuenta de todos estos servicios que ofrece y manifiesta sus compromisos en orden a la mejora en la prestación de los mismos y en contribución a una gestión más transparente.