BILBAO, 12 May. (EUROPA PRESS) -
El PNV censuró hoy que el Gobierno vasco "deje de lado la solución a los problemas" de transporte de los ciudadanos vizcaínos para "empezar a resolver los de comunidades vecinas", con el proyecto de conexión con la localidad cántabra de Castro. En este sentido, defendió que "la prioridad ahora son los problemas de Bizkaia" y aseguró que "Castro puede esperar, Bizkaia no".
La formación jeltzale trasladó su "preocupación" y "alarma" sobre las decisiones que está adoptando el Ejecutivo autonómico en materia de transporte en una comparencia en Bilbao en la que estuvieron presentes el presidente del BBB, Andoni Ortuzar, junto a alcaldes y concejales del PNV en Bilbao, Trapaga, Ortuella, Durango, Abando, Santurtzi, Muskiz y Urduliz.
En su intervención, el presidente de la Ejecutiva vizcaína del PNV censuró el anuncio por parte del Gobierno del PSE de la realización de un estudio sobre posibles conexiones de transporte con Castro, mientras que obras "largamente esperadas" que estaban "comprometidas" para diferentes municipios vizcaínos "quedan pospuestas sine die, cuando no suspendidas para siempre" con decisiones adoptadas "unilateralmente" y "no justificadas".
Entre ellas, citó la continuidad del tranvía al barrio bilbaíno de Rekalde, la llegada del Metro a Usansolo y Galdakao, las mejoras de EuskoTren en Durango o el soterramiento de las vías en Urduliz que, según indicó, "por lo que hemos entendido, a juicio del Gobierno vasco no responden ni al interés general ni a las preocupaciones de los ciudadanos de estos municipios.
También lamentó, en la misma línea, que el Ejecutivo "haya decidido que los santurtziarras que quieran usar el acceso de metro en Mamariga deberán pagar por este servicio".
Ortuzar denunció que, "en medio del malestar" originado por estas decisiones, los responsables del Gobierno vasco se "descuelgan anunciando que van a iniciar los estudios preceptivos para llevar el Metro a Castro" y censuró que, "en vez de dar respuesta a los problemas" de los vizcaínos, "se olvida de ellos y pretende resolver los problemas de transporte de otra comunidad".
El dirigente nacionalista advirtió de que "el colapso" de la autopista A-8, que "según el lehendakari López" se debe a "los coches que vienen de Castro", se origina en zonas como "Ugaldebieta, el acceso de la báscula de Ortuella o el acceso de Max Center" porque "los que tenemos un problema de movilidad somos los ciudadadanos de la zona oeste de la Margen Izquierda, de Zona Minera y de gran parte de Las Encartaciones".
En esta línea, indicó que, en caso de que finalmente se realice la conexión con Castro "todo apunta" a que "va a ir por la línea de Feve hasta Arcentales y luego pinchará" hasta la localidad cántabra, por lo que "ningún vizcaíno occidental va a beneficiarse de esa infraestructura".
Tras preguntarse si para el lehendakari "Euskadi acaba en Portugalete", de donde es originario, insistió en que esos "50.000 vizcaínos a los que ahora se debía atender parece que somos ciudadanos de tercera" y que esta zona vizcaína es "un agujero negro para este Gobierno".
Ortuzar precisó que al PNV le parece "bien" que los socialistas vascos "hablen con el Gobierno de Cantabria" o "aunen posiciones con los socialistas cántabros", pero subrayó que "no estaría de más que preguntaran, escucharan y hablaran" con los ciudadanos de esas comarcas vizcaínas o con los representantes del PSE en esos municipios, que "seguro les van a decir que Bizkaia tiene otras prioridades" en materia de transporte como "para pasarnos a arreglar los problemas de otras comunidades autónomas".
De este manera, consideró que, tras los "esfuerzos" realizados hasta ahora en este campo, "había llegado el tiempo para completar el esfuerzo del Metro, superar las barreras en Urduliz, en Getxo o en Durango, acercar el Metro a los barrios de Santurtzi" o "dar solución a los problemas de comunicación" de Encartaciones y a la variante ferroviaria que sale del puerto, entre otros proyectos.
Sin embargo, lamentó, "el Gobierno vasco y el Partido Socialista han dejado de lado la solución a estos problemas y decidido empezar a resolver los problemas de comunicación de las comunidades vecinas". Aunque se mostró favorable a "mejorar las comunicaciones con todo el mundo", subrayó que el Gobierno vasco debe "marcar claramente las prioridades".
"Y la prioridad ahora son los problemas de Bizkaia y los ciudadanos de Bizkaia", aseguró Andoni Ortuzar, que añadió que "Castro puede esperar, pero Bizkaia no" y señaló que existe "una larga lista de prioridades" y, "si a ellos no se les ocurren, nosotros les pasamos la lista".
"NO LEEN LOS EXPEDIENTES"
Ante esta situación, aseguró que el PNV usará "todos los resortes a su alcance institucionales para que se cumplan los compromisos adoptados" para distintos proyectos. El presidente del BBB indicó que, si bien en el actual contexto de crisis se "merma la capacidad económica" para la inversión, "seguro que se puede hacer por fases".
En este sentido, indicó que el proyecto del tranvía de Rekalde "está listo" para "empezar cuando quieran", pero para ello "sería bueno que el Departamento de Transportes se reuniera con el Ayuntamiento de Bilbao".
En relación al proyecto de soterramiento en Urduliz, rechazó que la inversión prevista para el Ejecutivo autonómico sean "los cuarenta y tantos millones que dice el Gobierno o el señor Pastor" y explicó que asciende a 18 millones.
"Hay veces que, con los responsables del Gobierno vasco y del PSE, uno tiene la duda de si no se leen los expedientes o simplemente tienen una tendencia casi natural a la mentira", manifestó Ortuzar, que aseguró además, en relación a las críticas al anterior Ejecutivo, que el convenio con el Ayuntamiento está firmado desde hace tres años y requiere "un trabajo bastante complejo que estaba en marcha" y era "una de las primeras obras que se iba a poner en marcha esta legislatura".
En cualquier caso, se preguntó "cuánto va a costar el Metro a Castro, quién lo va a hacer, quién lo va a pagar" y censuró que a los responsables socialistas "les duela gastarse el dinero en Urduliz" y, sin embargo, "lo quieren gastar alegremente para ir a Castro".