La alcaldesa de Cáceres se ofrece a "buscar soluciones" ante el cierre cautelar de ocho locales en La Madrila

Dos De Los Ocho Locales De Cáceres Que Serán Clausurados Por Ruido
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 13 marzo 2012 14:29

Nevado asegura que "es un tema muy serio" y apuesta por colaborar "para compaginar el derecho al ocio y al descanso"

CÁCERES, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

La alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado, se ha ofrecido a "buscar soluciones" ante el cierre cautelar de ocho locales de ocio en la zona de La Madrila que ha ordenado la sección segunda de la Audiencia Provincial de Cáceres por molestias de ruido.

Nevado ha asegurado que "es un tema muy serio" y tras mostrar "el más absoluto respeto a las decisiones judiciales" ha ofrecido "toda la colaboración del mundo" para "compaginar el derecho al ocio de los jóvenes y el descanso de los vecinos".

"Estamos hablando de un delito muy serio de carácter medioambiental y hay que tener todas las precauciones del mundo", ha aseverado la regidora que insiste en que el ayuntamiento "está abierto al diálogo" para "contribuir a buscar soluciones".

"Se trata de una decisión judicial que han tomado los tribunales y ellos son juristas y nosotros políticos y cada uno tiene que estar en su sitio", ha subrayado en otro momento de su intervención al ser preguntada sobre este asunto tras la entrega, a Cáritas Diocesana, de la recaudación de la última Feria del Dulce Conventual.

Nevado ha dicho que el ayuntamiento "abre sus puertas" a "todos" los que quieran contribuir a buscar una solución, tanto a los empresarios afectados por la clausura de sus locales, como a los vecinos afectados y la Asociación Cacereños contra el Ruido, que es la que interpuso la denuncia que ha motivado esta resolución judicial.

POSIBLES ALTERCADOS

En relación a la posibilidad de que cuando la medida del cierre de los locales se haga efectiva puedan producirse posibles altercados del orden público, la alcaldesa ha reiterado que "es la Audiencia Provincial la que ha tomado esa decisión y hay que respetarla por parte de todos".

"El Ayuntamiento está siempre al lado de los jóvenes, pero siempre desde el respeto a las resoluciones judiciales", sentencia.

En parecidos términos se ha pronunciado el portavoz del Gobierno local, Valentín Pacheco, que minutos antes que la regidora ha valorado este tema en una rueda de prensa en el consistorio en la que ha reconocido que esta medida "tiene una repercusión social" y que "no" se contempla la adopción de medidas de seguridad excepcionales cuando se lleve a cabo la clausura de estos bares de copas.

"El ayuntamiento adoptará las medidas que considere oportunas y se llevará a cabo un dispositivo acorde con las circunstancias", asegura Pacheco, que mantiene que "esta decisión judicial de trascendencia para la ciudad no tiene por qué interferir en la seguridad pública".

El portavoz se ha referido también a una "consecuencia lógica" de esta resolución judicial que es la pérdida de puestos de trabajo, que afectará a los empleados una vez se cierren los locales, y ha insistido en que desde el consistorio "se trabajará para dar una solución temporal a esta situación".

AUTO DE LA AUDIENCIA PROVINCIAL

Cabe resaltar que la Audiencia Provincial de Cáceres ha emitido este lunes un auto en el que ordena el cierre de ocho locales de la zona de La Madrila en la capital cacereña por originar ruido que molesta a los vecinos.

La orden debe hacerse efectiva antes de un mes y no cabe recurso a esta decisión que ordena su cierre hasta que el Juzgado número 6 de Cáceres decida sobre la denuncia presentada por la Asociación Cacereños Contra el Ruido.

Los bares son Latinos, La Cuerda, Pasadena, Down, Barroco, Maquiavelo, La Belle y Submarino. De esta forma la sección segunda de la Audiencia Provincial ha hecho caso a la citada asociación, que había solicitado esta medida cautelar hasta la decisión del juzgado.

La Asociación Contra el Ruido había interpuesto una querella contra los citados locales por ruidos y contra tres miembros de la anterior corporación local por un presunto delito de prevaricación medioambiental por no tomar medidas ante los problemas de contaminación acústica que sufre la zona.