José Antonio  Echávarri
José Antonio Echávarri - EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 11 marzo 2014 14:06

MÉRIDA, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

   El Gobierno de Extremadura ha advertido este martes de que "va a romper relaciones" con Tragsa si "no da marcha atrás" en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que está realizando en Extremadura.

   Una advertencia que ha realizado el consejero del consejero de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía del Gobierno de Extremadura, José Antonio Echávarri, tras instar a la empresa pública Tragsatec, incluida dentro del Grupo Tragsa, a agotar "todas las vías de negociación" entre la empresa y la representación sindical

   En rueda de prensa en Mérida, Echávarri ha destacado que si Tragsa "no da marcha atrás" en el expediente de regulación de empleo que está realizando en Extremadura "y no llegan a acuerdo, el Gobierno de Extremadura va a romper relaciones con Tragsa".

   El consejero de Agricultura ha destacado que la relación de Tragsa con la administración extremeña es "positiva",  y ha recordado que la inversión del ejecutivo en Tragsa y Tragsatec "ha superado los 30 millones y medio de euros" durante el ejercicio pasado por parte de la Consejería de Agricultura.

   Una inversión que se eleva "a 35 millones y medio de euros hasta 2015", ha señalado  Echávarri,  quien ha aseverado que "la hoja de ruta es muy clara, si no hay acuerdo, el Gobierno de Extremadura deja de ser cliente" de Tragsa y ha explicado que "cuando se echa un pulso a los trabajadores" y "al gobierno, el Consejo de Gobierno responde".

EL GOBIERNO PIDE TRANQUILIDAD A LOS TRABAJADORES

   Echávarri ha lanzado un mensaje a los trabajadores extremeños de esta empresa, a los que ha señalado que "pueden estar muy tranquilos" porque el Gobierno extremeño "está con ellos" y tienen "encima de la mesa un presupuesto que es más que suficiente para mantener el empleo".

   Echávarri ha destacado "el esfuerzo que tuvo que hacer" el presidente José Antonio Monago cuando llegó al Gobierno en 2011, porque "había un expediente de regulación de empleo" de la empresa Tragsa, y "para que no fuesen despedidos 317 trabajadores" se tuvo que poner "un importante presupuesto".

   "El Ejecutivo extremeño no puede consentir que se haga efectivo el ERE en nuestra comunidad autónoma si no se agotan antes todas las vías de negociación que todavía están abiertas" ha insistido el consejero, quien ha instado a la empresa a "que no destruya empleo porque aquí no hay razones para ello, "aquí tienen trabajo suficiente y una importante facturación".

   Por otra parte, la vicepresidenta extremeña, Cristina Teniente ha apostillado en este sentido que el Gobierno no va a "consentir que se destruya empleo en Extremadura por los problemas que esta empresa pueda tener fuera de esta comunidad autónoma".

   Teniente ha añadido que "el Gobierno de Extremadura ha sido durante años el gran cliente de Tragsa" y necesita saber si "la relación no sigue siendo importante o estratégica para Tragsa", porque de ser así "automáticamente dejará de serlo para el Gobierno de Extremadura".